Brayan de Jesús Oropeza Ruiz fue condenado este jueves a 30 años de cárcel por operar el primer dron que explotó frente a la tarima presidencial el 4 de agosto de 2018, acción cometida como parte de un plan magnicida con el que se pretendía segar la vida del presidente Nicolás Maduro.

Oropeza y otras 11 personas –Juan Carlos Monasterios, Argenis Valera, José Miguel Estrada, Oswaldo Castillo, Alberto Bracho, Henribert Rivas, Yolmer Escalona, Emirlendri Benítez, Yanín Pernía, Alejandro Pérez Gámez y Pedro Zambrano– recibieron la pena máxima contemplada en las leyes venezolanas.

Según detallara en una rueda de prensa el fiscal general de la República, Tarek William Saab, estas personas fueron encontradas culpables de los delitos de «traición a la patria y homicidio intencional calificado en grado de frustración en la persona del Presidente de la República, así como homicidio intencional calificado ejecutado con alevosía y por motivos fútiles en grado de frustración, y lanzamiento de artefacto explosivo en reuniones públicas».

(LaIguana.TV)