«El protagonista será el pueblo». Esta frase condensa el vuelco que ha querido dar el presidente electo Gustavo Petro a la toma de posesión, que promete un «estallido cultural» para sacudir los cimientos del protocolo estricto de ese tipo de ceremonias en Colombia.

El cambio que promueve el líder del Pacto Histórico se advierte desde la concepción de su juramentación, que extiende a los colombianos la facultad de gobernar con el lema «el pueblo también se posesiona», una propuesta inédita en la vida política del país.

La participación popular en un acto históricamente reservado a mandatarios y diplomáticos, y la presencia simbólica de las regiones colombianas con sus manifestaciones culturales y ancestrales, pareciera ser una mensaje para quienes claman desde los lugares más alejados por el reconocimiento y la paz.

¿Cómo será la logística?

El acto principal será en la Plaza de Bolívar. Otras seis plazas alternas también albergarán las actividades para esta toma de posesión, en la que se espera una asistencia de 100.000 personas.

Se tiene previsto que a las 10:00 de la mañana (hora local) comience la programación que será televisada y difundida en los medios de comunicaciones y redes sociales, informa El Tiempo.

El público general deberá llegar desde tempranas horas y cumplir con una serie de medidas de seguridad.

Se dispondrán seis tarimas y pantallas gigantes en el centro de la capital colombiana. Se espera que se llevan a cabo 136 eventos culturales, según El Tiempo.

Un total de 15.000 funcionarios de la Fuerza Pública se encargarán de la seguridad del evento de entrada libre.

¿Cómo empieza la ceremonia?

Como es tradicional en Colombia, cada 7 de agosto, el presidente electo debe caminar junto a su familia desde el Palacio de San Carlos, un construcción del siglo XVI, antigua residencia presidencial y sede actual de la Cancillería, hasta la Plaza de Bolívar. En la Constitución de 1886 se determinó esta fecha como el inicio del nuevo Gobierno.

El 7 de agosto es el aniversario de la Batalla de Boyacá, enfrentamiento militar ocurrido en 1819 entre las tropas del Libertador Simón Bolívar y el Ejército realista, que fue decisivo para la independencia de Colombia.

En este recorrido, de aproximadamente 200 metros, el mandatario entrante ha pedido que haya símbolos de biodiversidad (Colombia se encuentra entre los países más biodiversos del mundo) y de las distintas regiones del país, que son: Caribe, Pacífico, Orinoquía, Amazonía, Andina e Insular.

En la emblemática Plaza de Bolívar, ubicada en el centro histórico de la capital y cuya extensión de 13.903 metros cuadrados, estará exhibida la espada de Bolívar en una urna de cristal y la escultura ‘La paloma de la paz’, donada al Estado colombiano por el reconocido artista medellinense Fernando Botero.

La espada fue sustraída de la Casa Museo Quinta de Bolívar, ubicada en Bogotá, el 17 de enero de 1974, durante una acción de la guerrilla colombiana Movimiento 19 de abril (M-19).

En la década de 1990, cuando el grupo guerrillero se desmovilizó, devolvieron el símbolo patrio a las autoridades. Fue guardada durante años en una bóveda del Banco de la República y en 2020 la trasladaron a la Casa de Nariño, donde reposa bajo custodia.

Otra novedad es que las manifestaciones culturales no serán exclusivas de la capital del país, pues también se realizarán en ciudades como Medellín, Cali y Neiva; en la isla de San Andrés; así como en la zona fronteriza con Venezuela, donde ya hubo un encuentro entre sus cancilleres con miras a normalizar las relaciones diplomáticas, y en Canadá.

¿Qué ocurre en la toma de posesión?

El traspaso de mando se realizará a las afueras sede del Congreso, después de las 3:00 de la tarde (hora local). Esta será la primera vez que no se utiliza alfombra roja, como confirmó a Blu Radio la coordinadora del evento, Marisol Rojas.

Según el protocolo que se ha seguido en otras oportunidades, le corresponde la presidente del Senado, Roy Barreras, tomar el juramento de Petro y ponerle la banda presidencial. A partir de ese momento, el presidente, ya oficialmente en el cargo, deberá dar un discurso.

Petro pidió que no se realizara el ‘besamanos’, un acto ceremonial en la Casa de Nariño, sede del Gobierno, donde cada mandatario saluda al nuevo presidente y a su familia. Solamente hará un saludo general.

¿Quiénes son los invitados?

Entre los presidentes de la región que estarán en la toma de posesión se encuentran: Alberto Fernández, de Argentina; Luis Arce, de Bolivia; Gabriel Boric, de Chile; Rodrigo Chávez, de Costa Rica; Guillermo Lasso, de Ecuador; Xiomara Castro, de Honduras; Laurentino Cortizo, de Panamá; Mario Abdó, de Paraguay y Luis Abinader, de República Dominicana. A Pedro Castillo, de Perú, el Congreso le negó la autorización para asistir a la ceremonia.

Del mismo modo, estarán representantes de otros países como el rey de España y jefe de Estado, Felipe VI; el jefe de Gobierno de Curazao, Bernard Whiteman; el vicepresidente de El Salvador, Félix Ulloa; el canciller mexicano Marcelo Ebrard y Beatriz Gutiérrez, esposa del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Por el Gobierno de EE.UU., Joe Biden informó que concurrirán Samantha Power, administradora de la Agencia de ese país para el Desarrollo Internacional (Usaid); Gregory Meeks, presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes; Francisco L. Palmieri, encargado de Negocios de la Embajada estadounidense en Bogotá; Desirée Cormier Smith, representante Especial para la Equidad y la Justicia Racial del Departamento de Estado, y Juan González, asistente especial del presidente y director principal para Asuntos del Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, según Canal 1.

El líder de Pacto Histórico pidió que lo acompañen en su investidura varias personas que conoció durante su campaña electoral. Se trata de Genoveva Palacios, de la ciudad de Quibdó (Chocó); las familia López, cafeteros de Anserma (Caldas) y Londoño, de Santa Helena (Antioquia), y Arnulfo Muñoz, un pescador artesanal que lo recibió en su casa en Honda (Tolima).

Además, estará Kellyth Garcés, una mujer que trabaja en el aseo de Medellín y que fue acosada por un militante del uribismo por llevar en un afiche de Petro en su carrito de recoger la basura.

Otra particularidad anunciada en las redes por Maximiliano Reyes, subsecretario de la Cancillería mexicana para América Latina y el Caribe, es que tanto a Petro como a la vicepresidenta Francia Márquez se les obsequiará un bastón de mando como un «buen augurio», que fue entregado por Anatolio Trinidad, autoridad del pueblo Chontal y Adalberta Chávez, representante afromexicana de Chacahua, al secretario de Relaciones Exteriores de ese país, Marcelo Ebrard.

Estallido cultural

Las manifestaciones culturales ocupan una posición protagónica en esta transmisión de mando, donde se ha prometido un «estallido cultural» para un país que hace un año vivió el llamado «estallido social» en contra de las políticas de Iván Duque.

La ministra de cultura designada, Patricia Ariza, ya había adelantado que habría un «estallido cultural» en los primeros cien días de Gobierno, por lo que se tomará la juramentación como el inicio de esa política, que propone enfocarse en las propuestas de las regiones, sectores juveniles y mujeres.

En un video colgado en su cuenta de Twitter, la artista plástica y dramaturga afirmó que en la transmisión de mando habrá «mil artistas de diferentes regiones, de distintos ritmos y culturas de Colombia», que interpretarán «desde la música sinfónica hasta las populares y regionales con sus saberes y sabidurías».

«Vamos a estar todos juntos en la Plaza de Bolívar, en diferentes escenarios, para que todos podamos estar en el gran estallido cultural. Queremos colocar la cultura en el lugar que se merece», agregó.

En los medios trascendió que ese día habrá más de 70 agrupaciones artísticas y colectivos culturales provenientes de varios rincones de Colombia, en la llamada ‘La fiesta del cambio’.

Entre los artistas se encuentran Adriana Lucía, Andrea Echeverry y Héctor Buitrago, del grupo Aterciopelados; David Kawooq, de la agrupación Doctor Krápula; la cantora tradicional Nidia Góngora; el acordeonista vallenato Beto Jamaica; Los Gaiteros de San Jacinto, el salsero Wilson Manyoma, el cantante Edson Velandia y la formación musical Herencia de Timbiquí, según EFE.

Además, se presentará Fernando Montaño, reconocido bailarín clásico colombiano; habrá escenificaciones de El Carnaval de Negros y Blancos, la fiesta más importante del departamento de Nariño y canciones de grupos de música andina y popular.

En Twitter, la artista plástica Adriana Mejía Aguado compartió grabaciones de quienes actuarán en el evento multitudinario.

Una pequeña polémica

Esta juramentación no ha estado exenta de controversia, incluso antes de realizarse. A finales de julio se presentó oficialmente la imagen de la transmisión oficial de mando 2022-2026, donde aparecen tres mariposas con los colores de la bandera colombiana.

El diseñador Carlos Duque publicó la gráfica en sus redes y afirmó que consideraba las mariposas como símbolo de la «biodiversidad, el compromiso ambiental y la fragilidad de la vida en todas sus manifestaciones».

En Twitter las críticas no se hicieron esperar. Varios usuarios señalaron que por la similitud de las mariposas con las existentes en un banco de imágenes de internet podría tratarse de «plagio» o de falta de creatividad.

Como respuesta, Duque escribió en un trino que algunos confundían «la imagen simbólica de un evento con el diseño de una marca o un logotipo».

Además, zanjó el asunto agregando: «He dicho que diseñé un símbolo, en este caso ilustrado con fotos de stock, no un logo. Lo de plagio es otra conversación pues no existe en el planeta una imagen igual. Quiero verla».

¿Cuál es el costo?

La cantidad de dinero destinado para esta toma de posesión, que ha prometido romper esquemas, generó especulaciones de quienes afirmaron que podría ascender a 5.000 millones de pesos (aproximadamente 1,3 millones de dólares). Sin embargo, la coordinadora de comunicaciones de este evento, Marisol Rojas, informó que la Administración de Duque dejó 1.859 millones de pesos para ello, que sumado a los impuestos, alcanzaría los 2.400 millones de pesos (unos 500.000 dólares).

Rojas aclaró se maneja este presupuesto para este tipo de actos donde participan jefes de Estado, de Gobierno y diplomáticos. Lo distinto, en esta oportunidad, es que no será una ceremonia cerrada, y que contará con la asistencia popular.

«Esta es una posesión de mando totalmente diferente a todas las que se han realizado en el país, en Latinoamérica y el mundo, porque es una posesión del pueblo. El presidente Petro ha querido que no sea únicamente para un grupo exclusivo de personas», manifestó.

(RT)