Una falta desesperante de instructores de vuelo y una enorme afluencia de alumnos internacionales han llevado al sistema de entrenamiento de pilotos de la Fuerza Aérea del Reino Unido a una situación que ha sido calificada como «un escándalo».  

No es para menos, pues los reclutas de la Real Fuerza Aérea pasan cada vez más meses esperando a que se liberen plazas libres para la formación como pilotos, informa Sky News. De hecho, la escala de los retrasos es tan grande que se ha convertido en toda una crisis causada por una multitud de factores, indican los documentos filtrados a la cadena. 

Las fuentes militares británicas alertan que estos retrasos en la formación de pilotos podrían afectar la disponibilidad de tripulaciones para operar los escuadrones de los cazas Typhoon y F-35. Pero no solo los pilotos de combate experimentan estos problemas, pues lo mismo está ocurriendo en el caso de los pilotos de la aviación de transporte y helicópteros, tanto en la Fuerza Aérea como en la Armada. 

Una circular cerrada emitida en el mes de mayo y diapositivas de una presentación del mes de julio incluso mencionan la posibilidad de que la Fuerza Aérea pida a 30 de sus reclutas que abandonen el programa voluntariamente. Con ello, Sky News destaca que en una de las notas se alerta sobre el «riesgo reputacional» que conllevaría esta acción. 

Los ‘holdies’ de la Real Fuerza Aérea 

El problema se hizo tan prominente que en los documentos incluso se ha creado un término para llamar a los reclutas que están esperando recibir su formación: holdies. Y no es para menos, pues actualmente hay 347 postulantes esperando su plaza en un curso de formación o curso de reentrenamiento, reveló uno de los documentos. 

Esto representa más de la mitad de los 596 militares que están en el sistema de formación de pilotos del Reino Unido. Más aún, unos 80 pilotos tendrán que esperar tres años y medio para licenciarse en el pilotaje de aviones de varios motores: un requisito indispensable para manejar aviones de transporte como el Airbus A400M y C-17 o los aviones de reconocimiento y aviones de patrulla marítima Poseidon. 

En el caso de los helicópteros, los reclutas tendrán que esperar entre dos y tres años para aprender a pilotar el Chinook. 

Causas de la crisis 

Una de las causas de los problemas que está experimentando ahora la Fuerza Aérea británica tiene que ver con Rolls-Royce que aparte de ser un renombrado fabricantes de autos, también produce motores de aviones. Según los documentos filtrados, la falta de fiabilidad de las plantas motrices que la compañía proporciona para los cazas de entrenamiento Hawk Jet creará un cuello de botella a lo largo de los próximos tres años y aumentará el tiempo de espera de los reclutas en unos 12 meses. 

Otro motivo de preocupación es la fuga de personal cualificado para ser instructores de vuelo. Muchos abandonan la Fuerza Aérea por ofertas de trabajo mejor pagadas en la industria. 

«La fuga es tan grande que con una plantilla tan pequeña nos acercamos a un punto de masa crítica», indica una de las diapositivas a las que tuvo acceso Sky News. 

Las ya de por sí limitadas plazas también son usadas para cumplir con los compromisos de Londres con Catar y Arabia Saudí. Al vender sus cazas Typhoon a estos dos países, el Reino Unido asumió la responsabilidad de formar a sus pilotos también como parte del trato. Esto aumentó el tiempo de espera de los pilotos británicos para completar la etapa final de su formación en el marco de la Unidad de Conversión Operativa, indicó una fuente militar al medio. 

De las 43 plazas disponibles, este año solo 11 están reservadas para los pilotos británicos que tienen que pasar por la etapa de conversión y migrar así de los aviones de entrenamiento a los cazas F-35 o Typhoon, reza el informe. 

«La cagada más grande de la Fuerza Aérea del Reino Unido» 

Un alto mando de la Fuerza Aérea, que prefirió mantener el anonimato, comentó la situación y describió lo que está ocurriendo con la formación como un «escándalo y crisis». Además, añadió que no es un tema reciente, pues ha sido un problema crónico a lo largo de los últimos 30 años. 

«De momento, esta es la cagada más grande en la Fuerza Aérea del Reino Unido. Tenemos un proceso de selección superado solo por la selección de astronautas, y se recibe así lo mejor de lo mejor, y luego hacemos que completen su formación de vuelo en seis u ocho años, cuando esto debería tomar solo dos o tres años», arremetió el entrevistado. 

También destacó que es «una completa locura», especialmente cuando vienen a expensas de los contribuyentes. Al mismo tiempo, otra fuente que sirve en la Fuerza Aérea negó que haya una crisis y aclaró que este año hay dificultades debido a que se planea retirar «un cierto número» de aeronaves como parte de la modernización. 

Curiosamente, la operación especial militar de Rusia en Ucrania exacerbó los problemas de formación en la Fuerza Aérea británica. Según las fuentes del medio, el Reino Unido ha sido presionado para proporcionar más cazas y tripulaciones al espacio aéreo de la OTAN. 

Por ejemplo, dichas fuentes citaron una ocasión cuando los instructores de la Unidad de Conversión Operativa en Coningsby tuvieron que cambiar el calendario de sus cursos de formación porque tenían que pilotar los cazas en misiones de alerta rápida. 

¿Qué soluciones se buscan? 

Para luchar con esta crisis de recursos humanos y los desafíos que supone, los oficiales de la Real Fuerza Aérea celebraron tres o cuatro reuniones al año, informan las fuentes. 

Los errores de formación ya mencionados resultaron en un cambio demográfico dentro de la fuerza. Así, ahora la edad media de un nuevo piloto cualificado es de 29 años, mientras que hace algunos años era de entre 20 y 25. Esto, destacan, «podría tener unas implicaciones significativas para el desarrollo profesional futuro, el alcance y la retención». 

Algunos de los problemas actuales vienen desde el final de la Guerra Fría, explican las fuentes de defensa. Según ellas, todo ello es resultado de los recortes presupuestarios y los planes para privatizar gran parte de la formación de pilotos militares. 

«Se estableció un sistema que funciona solo si todo va perfectamente», dijo un exoficial de la Fuerza Aérea. 

El portavoz de la Real Fuerza Aérea no desestimó los reportes y dijo que mientras hay desafíos con cuellos de botella en la formación, están trabajando para «mejorar la experiencia y los resultados de formación de nuestro personal, lo que incluye la contratación de más instructores y una gestión activa de los plazos de formación». 

(Sputnik)