Un venezolano de 26 años identificado como Steven Hernández fue asesinado a puñaladas la madrugada del pasado 15 de agosto en la localidad de Couva (Trinidad y Tobago), reportaron medios locales citando fuentes policiales.

Según los informes mediáticos, el crimen ocurrió al filo de la media noche. Un hombre que habló con los periodistas bajo condición de anonimato, aseguró que Hernández vivía en una choza de madera cercana a los matorrales donde se encontró su cuerpo.

Por su parte, las autoridades refirieron que si bien el venezolano residía en Trinidad desde hace tres años, se había mudado recientemente al vecindario y allí compartía posada con otros compatriotas que aseguraron, en un escaso inglés, que el fallecido no tenía familia.

Una mujer, que se negó a dar el nombre, incluso dijo a la Policía que no lo conocía.

Aparentemente, la vivienda de madera de Hernández compartía propiedad con otra más grande de concreto, que está habitada por venezolanos y trinitenses. Empero, ninguno de sus residentes habituales quiso hablar con los medios sobre Hernández o sobre el asesinato.

Otra persona perteneciente al primer grupo, que declaró bajo resguardo de identidad, caracterizó al venezolano como uno más de los que viven en el sector, que en su decir, no molestaban a nadie.

Sin embargo comentó que la noche del sábado, Hernández y algunos de sus compatriotas estaban ingiriendo bebidas alcohólicas y en ese contexto se desató una fuerte discusión. En su opinión, Hernández habría sido perseguido y atacado por al menos una de estas personas en los arbustos en los que más tarde se encontró su cadáver.

La Policía declinó ofrecer comentarios aunque aseveró que las investigaciones para esclarecer el hecho continúan.

(LaIguana.TV)