En su más reciente entrega de «Tubazos», el periodista venezolano Eligio Rojas profundizó sobre el tráfico de armas de alto calibre, municiones y artefactos explosivos al cual se dedican varias organizaciones criminales en el país actualmente.

Rojas detalló que los grupos que se dedican a este tipo de actividades se ubican en tres regiones del país: la región central, con el «Tren del Llano», el «Tren de Aragua» y «Los Guaricheros» (Carabobo); la región zuliana con las bandas de «El Oso», «El Jeico Masacre» y «Yet Nava», y la región sur (estado Bolívar) con los grupos «El Ciego», «El Run» y «El Perú».

Destacó que aparte de los grupos criminales, existen personas que no necesariamente pertenecen a estas organizaciones, pero sí proveen de armamento a las bandas. Citó como ejemplo la detención realizada el pasado 1° de agosto en Puerto Viejo, Catia La Mar, de cuatro sujetos que introducían al estado La Guaira este tipo de armamento en distintos vehículos. Durante dicho procedimiento fueron incautadas 500 municiones calibre 7.62×39 destinadas a fusiles, granadas y cargadores de fusil R15.

Asimismo, señaló que, de acuerdo con los reportes policiales, en los últimos 15 días han sido decomisadas 80 armas de alto calibre y 2.376 cartuchos, la mayoría destinados a fusiles.

Según las fuentes consultadas por el periodista, la acumulación de armas, municiones y artefactos explosivos por parte de las organizaciones criminales puede responder a tres razones: la preparación de una logística para custodiar grandes alijos de drogas, la reagrupación de las bandas por zonas para cometer actos que van más allá del robo, sicariato y secuestro y, por último, la delincuencia desestabilizadora. 

Las heridas que dejó William James Vahey en Venezuela

Eligio Rojas también abordó el caso del estadounidense William James Vahey, catalogado por el FBI como el depredador sexual más prolífico de la historia, quien dejó alrededor de 30 víctimas en Venezuela.

De acuerdo con el periodista, este sujeto en los años 60 fue detenido en EEUU por abuso sexual, quedando en el registro de ofensores sexuales, pero, pese a ello, logró burlar las barreras e incorporarse al Sistema de Escuelas Internacionales Americanas, a la cual pertenece la Escuela Campo Alegre.

Entre los años 2002 y 2009 fue profesor de Geografía e Historia en dicha institución mirandina y ocupó el cargo de director del Club de Viajes de Bachillerato Intermedio, por medio del cual organizaba viajes nacionales e internacionales de carácter deportivo.

Dos de esos viajes fueron a Panamá y Costa Rica, donde cometió abusos contra los 90 estudiantes que los acompañaban, 30 de ellos de la Escuela Campo Alegre y 60 de una escuela en Reino Unido.

El modus operandi de Vahey era entregar en horas de la noche galletas con somníferos a los menores de edad, quienes quedaban adormecidos y así proceder a abusar de ellos.

Vahey fue descubierto en 2014 en Nicaragua, luego de que una empleada doméstica hallara un pendrive con fotografías de niños desnudos y en escenas propias de películas pornográficas.

Tras conocerse el hecho, solo una de las víctimas en Venezuela entabló una demanda civil contra la Escuela Campo Alegre. De acuerdo con Rojas, dicha denuncia lleva 8 años en curso, sin que se produzca una decisión.

Actualmente, el expediente se encuentra en la sala social del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), puesto que la escuela se negó a llegar a un acuerdo con la víctima y en instancias anteriores la decisión se posicionó a favor de la institución educativa.

Resaltó que la presidenta de la Comisión Permanente para las Familias, Religión y Cultos de la Asamblea Nacional (AN), diputada Asia Villegas, escuchó a los abogados de la víctima y prometió darles el derecho de palabra ante la instancia que preside.

Rojas agregó que la audiencia final en la sala social del TSJ está pendiente.

(LaIguana.TV)