La noche del 12 al 13 de septiembre estalló otra ronda de hostilidades entre Armenia y Azerbaiyán. Los fallecidos ya cuentan por docenas mientras sus vecinos se posicionan al respecto. La Organización del Tratado de Seguridad Colectiva —a la que pertenece Armenia— se reúne para abordar la situación, mientras Turquía e Irán apoyan a bandos opuestos. 

Desde Armenia comunicaron que las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán «iniciaron un intenso bombardeo de artillería», agregando más tarde que «nuestras bajas ascienden a 49 personas». A su vez, el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán informó que el enfrentamiento armado se produjo en la frontera armenio-azerí debido a una provocación realizada por parte de las Fuerzas Armadas de Armenia. 

Ereván solicitó el apoyo de Moscú en el marco del Tratado de Amistad, Cooperación y Ayuda Recíproca; también apeló a la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) y al Consejo de Seguridad de la ONU en busca de una «reacción adecuada». Horas después, los dos bandos acordaron detener los disparos gracias a la mediación de Rusia

Rusia llama seguir los acuerdos bilaterales en vigor 

Inmediatamente después de la escalada, el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, mantuvo una conversación telefónica con el presidente de Rusia, Vladímir Putin, para abordar el aumento de las tensiones en la frontera. Pashinián calificó de inaceptables las acciones de Azerbaiyán y subrayó la importancia de «una respuesta adecuada por parte de la comunidad internacional». 

«El primer ministro compartió los detalles de las acciones provocativas y agresivas que las Fuerzas Armadas de Azerbaiyán lanzaron contra el territorio soberano de Armenia a la medianoche y que estuvieron acompañadas de bombardeos de artillería», señala el comunicado del Gobierno armenio. 

En una declaración difundida este 13 de septiembre, el Ministerio de Exteriores de Rusia manifestó «extrema preocupación por el brusco deterioro de la situación en algunas áreas de la frontera armenio-azerbaiyana» en la noche del 12 al 13 de septiembre. 

«Instamos a las partes a evitar una mayor escalada de la situación, actuar con moderación y observar estrictamente el alto el fuego de conformidad con las declaraciones trilaterales de los líderes de Rusia, Armenia y Azerbaiyán del 9 de noviembre de 2020, el 11 de enero y el 26 de noviembre de 2021», dice el comunicado oficial. 

Moscú mantiene estrechos contactos con Bakú y Ereván, añade el texto, y recibió de la parte armenia la petición de ayudar a resolver la situación en consonancia con los acuerdos bilaterales en vigor, así como en el marco de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC). 

En noviembre del 2020, ambas partes alcanzaron un acuerdo de paz con la mediación de Rusia. Los entendimientos alcanzados implican también el lanzamiento del proceso de la demarcación de la frontera entre Armenia y Azerbaiyán y el desbloqueo de las relaciones económicas y las rutas de transporte en la región. 

La OTSC ve inadmisible el uso de la fuerza 

Por su parte, la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva —que incluye a Armenia— calificó de inadmisible el uso de la fuerza. Fundada en 2002, la OTSC aglutina hoy a Armenia, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán, Rusia y Tayikistán.  

«Vemos inadmisible el uso de la fuerza. Las controversias deben resolverse exclusivamente con métodos políticos y diplomáticos, a través de los acuerdos refrendados en las declaraciones de los líderes de Armenia, Azerbaiyán y Rusia del 9 de noviembre de 2020, el 11 de enero y el 26 de noviembre de 2021», declaró a los periodistas el portavoz de la OTSC, Vladímir Zainetdínov. 

Irán y Turquía apoyan a bandos opuestos 

El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, afirmó que su país está preparado para respaldar el proceso de recuperación de la paz en la región y agregó que a Irán le importa la seguridad de Armenia. Raisi subrayó que los conflictos en la región deben solucionarse de forma pacífica y que Irán ocupa una posición clara respecto a la integridad territorial de los Estados. 

«El primer ministro refirió en detalle las acciones provocadoras y agresivas que cometieron las fuerzas armadas de Azerbaiyán contra el territorio soberano de Armenia. Raisi declaró que una nueva guerra en la región del Cáucaso del Sur es inaceptable y que Irán sigue atentamente el desarrollo de los acontecimientos», informó la oficina de prensa del Gabinete armenio. 

Por su parte, el responsable de la Defensa turca, Hulusi Akar, afirmó que Ankara está del lado de Bakú, informó el servicio de prensa del Ministerio de Defensa de Azerbaiyán. El ministro turco declaró que Ankara «como siempre ha sido, hoy está por el lado de Azerbaiyán». 

«Hasanov informó a su colega sobre las hostilidades que ocurrieron como resultado de una provocación a larga escala de la parte armenia en la frontera armenio-azerbaiyana (…) Las partes también intercambiaron opiniones sobre la situación en la frontera armenio-azerbaiyana», resalta el comunicado. 

El ministro de Exteriores turco, Mevlut Cavusoglu, reiteró el apoyo de Ankara a Bakú frente a lo que calificó como «una provocación» por parte de Ereván. El canciller turco sugirió a Armenia centrarse en la delimitación de las fronteras y apuntó que debe resolver su litigio con Azerbaiyán para que haya paz y estabilidad en el Cáucaso Sur. 

«Anoche hubo una provocación y Azerbaiyán respondió a ella (…) Habían colocado minas a lo largo de (Nagorno) Karabaj durante el repliegue de las tropas (armenias)», afirmó Cavusoglu. 

Otras reacciones 

El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, está preocupado por los combates en la frontera entre Armenia y Azerbaiyán y llama a las partes a reducir las tensiones, declaró un portavoz de la ONU. 

«El Secretario General está profundamente preocuado por los informes de nuevos combates a lo largo de la frontera entre Armenia y Azerbaiyán. Pide a las partes que tomen medidas inmediatas para reducir las tensiones, ejercer la máxima moderación y resolver cualquier problema pendiente a través del diálogo y dentro de los formatos existentes. También los insta a implementar plenamente los acuerdos alcanzados previamente. El Secretario General expresa su apoyo a todos los esfuerzos de mediación en curso en la región», indicó el portavoz en un comunicado. 

Asimismo, el primer ministro Nikol Pashinián mantuvo una conversación telefónica con el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, y le informó en detalle de «la agresión perpetrada por Azerbaiyán». El secretario de Estado de EEUU, a su vez, expresó «profunda preocupación» por los informes de enfrentamientos a lo largo de la frontera armenio-azerbaiyana, incluidos los ataques contra asentamientos e infraestructura civil dentro de Armenia. 

«No puede haber una solución militar al conflicto. Instamos a poner fin a cualquier hostilidad militar de inmediato», enfatizó. 

El primer ministro de Armenia también abordó la situación con el presidente de Francia, Emmanuel Macron. El líder francés también calificó de inaceptable el aumento de las tensiones entre Armenia y Azerbaiyán y recalcó que es necesario resolver la situación, según el comunicado del Gobierno armenio. 

El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, llamó a las partes del conflicto armenio-azerbaiyano a poner fin a las hostilidades y regresar a la mesa de negociaciones. 

«Es imperativo que cesen las hostilidades y que [las partes] vuelvan a la mesa de negociaciones. Todas las fuerzas deben retirarse a las posiciones que ocupaban antes de esta escalada y respetar plenamente el alto el fuego», declaró Borrell en una declaración publicada en la página web del Servicio Europeo de Acción Exterior. 

El jefe de la diplomacia europea agregó que se comunicará con los ministros de Exteriores de Armenia y Azerbaiyán, mientras el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, está en contacto con los jefes de ambos Estados. 

Armenia y Azerbaiyán volvieron a enfrentarse el 23 de septiembre de 2020 en la región de Nagorno Karabaj, de población mayoritariamente armenia, foco de conflicto desde que decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán. Las hostilidades, que se prolongaron por seis semanas y causaron miles de muertos, cesaron el 10 de noviembre de 2020 en virtud de una declaración adoptada un día antes por los líderes de Armenia, Azerbaiyán y Rusia. 

Por acuerdo entre las partes, Rusia emplazó en la zona un contingente de paz, paralelamente a la retirada de fuerzas armenias desde los distritos de Agdam, Kelbecer (Kalbajar) y Lachín, arrebatados a Azerbaiyán durante la guerra de 1992-1994. Tras varios meses de calma relativa, en la frontera entre Armenia y Azerbaiyán volvieron a registrarse incidentes armados, con denuncias recíprocas de incursiones e intercambios de disparos que dejaron bajas mortales. 

(Sputnik)