Además de la dificultad de suministro por las sanciones impuestas a Rusia, los países importadores de petróleo enfrentan dificultades por las variaciones de precio del combustible, lo que ha generado derivaciones que empiezan a desplazar al dólar como moneda internacional.

Un análisis de la especialista energética Irina Slav, publicado en Oil Price, señala que la Unión Europea es altamente dependiente de la importación de petróleo, lo que representa un desafío económico persistente en caso de volatilidad en los precios.

«Dado que mucho del petróleo comerciado en el mundo está tasado en dólares estadounidenses, entre más caro sea el dólar, incluso si los precios mismos del petróleo no han cambiado mucho, más alta resulta la cuenta de importación de este petróleo», explica la analista.

Un analista de la entidad financiera suiza UBS, Giovanni Staunovo, explicó a Bloomberg que un dólar fuerte es un viento en contra para los países consumidores de petróleo cuyas monedas no están ligadas al dólar estadounidense, en un escenario donde los precios del petróleo han aumentado mucho más en términos de moneda local durante los últimos 12 meses.

Esto podría generar, estimó Slav, que las monedas locales busquen una participación más protagónica en el mercado energético en el futuro.

Por ejemplo, señaló, China, que es el mayor comprador de petróleo del planeta, ha buscado la expansión de su moneda nacional en el comercio internacional durante años.

Esto se suma a que Rusia, uno de los principales exportadores de petróleo del mundo y simpatizante de China en la alianza BRICS (a la que se suman la India, Sudáfrica y Brasil), también fomenta el comercio con monedas locales diferentes al dólar, también en relación a las sanciones económicas que ha impuesto en su contra la Unión Europea.

«Otras naciones en desarrollo, incluida la India, están también contemplando la idea de reemplazar la moneda del comercio local con sus monedas locales en acuerdos de comercio bilateral. La India incluso ha desarrollado un mecanismo para el asentamiento de acuerdos internacionales en rupias, a pesar de que sigue pagando el petróleo ruso en dólares estadounidenses», apuntó la especialista de Oil Price.

A pesar de todos estos movimientos en las economías locales, reconoció, es incierto cómo operarán en la Unión Europea toda vez que tiene tiempo y ha hecho explícita la cercanía de su alianza con Estados Unidos, sobre todo en materia energética.

Sin embargo, agregó, debido a la relevancia del dólar estadounidense en la adquisición de petróleo y lo que parece una desaceleración de la economía global, es posible que naciones importadoras del combustible encuentren en ello un estímulo para sus planes de deslizamiento de la moneda norteamericana y de mayor empleo de sus monedas locales.

(Sputnik)