Los colegios electorales cerraron hoy sus telones tras una histórica segunda vuelta de comicios presidenciales en la que estuvieron aptos para votar más de 156 millones de personas para elegir el próximo presidente de Brasil.

El exgobernante Luiz Inácio Lula da Silva, abanderado del Partido de los Trabajadores, y el mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro, quien ambiciona reelegirse como postulante del Partido Liberal, disputaron el balotaje.

Como ninguno de los aspirantes al poder alcanzó más de la mitad de las papeletas válidas en la primera ronda del 2 de octubre, los dos más nombrados tuvieron que enfrentarse en esta consulta.

La votación, que abrió a las 08:00 y cerró a las 17:00, hora local (de Brasilia), en los 26 estados y el Distrito Federal, se realizó en 472 mil 75 secciones electivas de cinco mil 570 ciudades del país y en 181 en el exterior.

También en 12 estados nacionales, los electores tuvieron que designar un gobernador.

El presidente del Tribunal Superior Electoral, Alexandre de Moraes, se negó a la posibilidad de posponer el cierre o ampliar el horario de votación.

Fue una respuesta del magistrado a solicitudes y preguntas en redes sociales después de conocerse informes de operaciones de la Policía Federal de Carreteras que obstaculizaron la visita de los electores a los lugares de sufragio, sobre todo en el nordeste.

El voto resultó obligatorio para mayores de 18 años y facultativo para analfabetos, mayores de 70 años de edad y personas con 16 y 17 calendarios.

(Prensa Latina)