El atacante del PSG sufrió las duras entradas del combinado balcánico (especialmente las de Gudelj y Milenkovic, ambas en la segunda mitad) durante todo el encuentro y tuvo que marcharse dolorido antes del final. En el banquillo le pusieron hielo y su imagen, hundido y con lágrimas en los ojos mientras era consolado por sus compañeros, conmocionó a todo Brasil.

«Ha sufrido un golpe, pero ojalá no sea nada», señaló tras el encuentro Vinicius. «Estamos preocupados por la lesión de Neymar. Esperamos que no sea nada», afirmó Rodrygo en Radio MARCA. El fantasma del Mundial 2014, cuando el golpe de Zúñiga en la espalda en los cuartos ante Colombia le privó de jugar las semifinales ante Alemania en casa, sobrevuela ya a la ‘canarinha’. Veremos cómo evoluciona, aunque sus antecedentes de lesiones en los tobillos con el PSG no invitan al optimismo.

Las lágrimas de Neymar en el banquillo tras retirarse lastimado del tobillo derecho no son para menos, más teniendo en cuenta que se le había inflamado. Y es que los tobillos son una pesadilla para el brasileño en las últimas temporadas. En las últimas cuatro temporadas ha estado 198 días de baja por culpa de tres lesiones, dos de ellas bastante graves. Un dato que seguramente tenga mucho que ver con el desconsuelo del jugador, sabedor de que los tobillos son su talón de Aquiles.  

(marca.com)