El presidente de Rusia, Vladímir Putin, declaró este viernes que la introducción del tope al precio del petróleo ruso es «perjudicial» para los mercados energéticos mundiales y advirtió que afectará principalmente a los que ha tomado la decisión de imponer ese límite.

Como resultado de la medida, la inversión mundial «caerá a cero», lo que provocará el alza de los precios del crudo, vaticinó el mandatario tras una cumbre con los líderes de la Unión Económica Euroasiática.

Paralelamente, aseguró que la decisión no afectará a la economía del país euroasiático, dado que Moscú vende actualmente el petróleo «más o menos» al precio fijado por la UE, el G7 y Australia, que lo establecieron a 60 dólares por barril. «No se preocupen por nuestro presupuesto», dijo, agregando que Rusia revelará «en los próximos días» su respuesta a la medida.

El tope de precios entró en vigor el lunes en todas las jurisdicciones del G7, la UE y Australia. Hungría, no obstante, quedó exenta de aplicar ese límite.

Esa misma jornada, la UE empezó a aplicar un embargo a los suministros de petróleo ruso transportados al bloque por barco. Mientras, el tope para los productos petrolíferos de origen ruso entrará en vigor el 5 de febrero de 2023.

(RT)