Un terremoto de magnitud 6.0 se registró en el estado mexicano de Guerrero, cerca de la costa del Pacífico en el sur del país. Según la información preliminar, no se reportan daños significativos.

El temblor se detectó a las 8.31 hora local (14.31 GMT), con el epicentro ubicado a 17 km al sur de la ciudad de Técpan de Galeana, a una profundidad de 10 kilómetros (km), informó el Servicio Sismológico Nacional (SSN) en sus redes sociales.

En la capital del país se activó la alarma sísmica conectada a sensores ubicados en la costa sur del océano Pacífico, y miles de personas salieron a las calles por precaución.

El presidente Andrés Manuel López Obrador publicó en su cuenta oficial de Twitter que, según el reporte en su posesión, «afortunadamente no hay daños mayores». El jefe del Ejecutivo indicó desde el Palacio Nacional, sede del Ejecutivo federal que «está aplicándose el plan de Protección Civil».

La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, tuiteó que, de acuerdo con Protección Civil de la entidad con costas al Pacífico, «no se registran daños mayores, sin embargo se mantienen monitoreos constantes en coordinación con municipios».

Por su parte, la jefa de Gobierno de la capital, Claudia Sheinbaum, reportó en la misma red social que no hay daños en la megalópolis, después del sobrevuelo de los helicópteros Cóndor de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC). Sheinbaum difundió un comunicado de Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil en el que se descartan incidentes por el movimiento telúrico.

«Hemos establecido comunicación con las Unidades de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de las Alcaldías (capitalinas); no se reportan incidentes por el sismo registrado esta mañana», dice el informe oficial.

Los servicios públicos funcionan con normalidad y la percepción del temblor fue mínima, puntualizó la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSP).

En la megalópolis, los altavoces de más de 6.200 cámaras de seguridad se activan con una alerta sísmica en caso de terremoto, unos 50 segundos antes de que lleguen las ondas de un movimiento que supere los 6 grados de intensidad. El sistema está conectado a sensores en las costas del Pacífico, donde ocurren los principales puntos de choque entre placas tectónicas que causan los terremotos, en una zona de alta sismicidad.

(Sputnik)