El plan de Occidente para destruir la economía de Rusia, contra la cual se ha desplegado una agresión de sanciones sin precedentes, ha fracasado. Así lo declaró este jueves el presidente del país, Vladímir Putin.

De acuerdo con el mandatario, los gobiernos occidentales tenían la intención de “derribar la economía” del país en un corto periodo de tiempo mediante “el saqueo de sus reservas de divisas”. Sin embargo, comentó que este plan “no funcionó”.

Subrayó que para contrarrestar esa presión económica, la comunidad empresarial y las autoridades “colaboraron de forma profesional”, mientras que los ciudadanos “mostraron cohesión y responsabilidad”.

Putin señaló que para finales del año se prevé que el PIB caiga un 2,5 %. “Sí, por supuesto, es un declive, pero no es el colapso del 20 % que muchos expertos occidentales pronosticaban cuando el Occidente colectivo nos lanzó una guerra económica”, afirmó.

“Los niveles de precios en Rusia, tras un serio aumento en marzo y abril, se han mantenido prácticamente invariables desde mayo, y el rublo ruso se ha convertido en una de las monedas más fuertes del mundo desde principios del año”, dijo.

Destacó que este resultado se logró gracias a diversas medidas, entre ellas la conversión de los pagos por el gas ruso en rublos, el uso activo de las monedas nacionales en el comercio con los países socios y, sobre todo, “gracias a una política financiera responsable”.

(RT)