El número de muertos por el COVID-19 a nivel mundial disminuyó un 95% en lo que va de este año, informó el jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.

En este contexto, declaró que se muestra optimista sobre el hecho de que la OMS pueda declarar el fin de la pandemia en 2023.

«Nos alienta mucho una disminución constante de los casos registrados de muerte por el COVID-19, que bajaron un 95% en lo que va de año», declaró en una rueda de prensa.

No obstante, agregó que una en cada diez infecciones provoca que el COVID-19 se prolongue, por lo que estimó que «cientos de millones» de personas necesitarán un tratamiento más largo.

Además, Adhanom subrayó que la aparición de la nueva variante XBB.1.16 muestra que el virus sigue cambiando y todavía es capaz de provocar nuevas olas de enfermedad y muertes.

(Sputnik)