El Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA publicó este jueves una sorprendente imagen de un gran cráter de impacto, conocido como Belva, situado dentro del cráter marciano Jezero, donde aterrizó el róver Perseverance en febrero de 2021.

La NASA eligió esta depresión topográfica de 45 kilómetros de diámetro porque se piensa que alguna vez estuvo cubierta por agua, además de haber albergado el antiguo delta de un río, lo que podría revelar evidencias del pasado húmedo del planeta rojo. El cráter Jezero está ubicado en el borde occidental de la llanura Isidis Planitia, al norte del ecuador de Marte.

Por otro lado, el cráter Belva, que mide 0,9 kilómetros de ancho, se originó por el impacto de un meteorito hace miles de millones de años. En su interior existen múltiples localizaciones de lecho rocoso expuesto, así como una región en donde las capas sedimentarias están bruscamente inclinadas hacia abajo.

De acuerdo con el Laboratorio de Propulsión a Chorro, la panorámica se formó a partir de 152 fotografías capturadas el pasado 22 de abril, durante el 772.º día en Marte de la misión Perseverance, por el instrumento Mastcam-Z a bordo del róver. Asimismo, detalló que al momento en que se tomaron las imágenes el Perseverance estaba apostado al oeste del borde del cráter Belva, concretamente en un afloramiento rocoso de tonos claros identificado como ‘Echo Creek’.

Los investigadores sugirieron que las grandes rocas en primer plano pueden ser trozos de lecho rocoso que fueron expuestos por el impacto de un meteorito, o bien que estos fueron transportados al cráter mediante un sistema fluvial. Además, aseguraron que seguirán comparando las características del lecho rocoso con las capas de roca en las paredes distantes del cráter.

«Las misiones del rover de Marte generalmente terminan explorando el lecho rocoso en exposiciones pequeñas y planas en el espacio de trabajo inmediato del róver», indicó la científica Katie Stack, del Laboratorio de Propulsión a Chorro, quien destacó que este hecho motivó a su equipo para «obtener imágenes y estudiar a Belva». «Los cráteres de impacto pueden ofrecer grandes vistas y cortes verticales que brindan pistas importantes sobre el origen de estas rocas con una perspectiva y una escala que no solemos experimentar», señaló.

La NASA compartió el pasado jueves nuevas imágenes que revelan posibles evidencias geológicas de que un río profundo y de flujo rápido desembocaba en un antiguo lago marciano, ubicado en el cráter Jezero.

(RT)