El Ministerio de Exteriores surcoreano instó a Pyongyang a cancelar el lanzamiento de un satélite espacial que fue anunciado para los próximos días, según las sospechas de Seúl y Tokio, para encubrir otro ensayo de tecnologías de misiles balísticos.

«Hacemos una advertencia enérgica ante el anuncio de acciones provocativas de Corea del Norte que amenazan la paz regional y le instamos a retractarse de inmediato de su plan de lanzamiento ilegal», manifestó el portavoz de la Cancillería, Lim Soo-suk.

El diplomático surcoreano apuntó que ninguna excusa justificaría ese acto ilegal y que supondría «una violación grave» de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que prohíbe a Corea del Norte realizar lanzamientos con el uso de tecnologías de misiles balísticos.

Si Pyongyang sigue adelante con ese plan, pagará «el debido precio» y «sufrirá», prometió Lim.

Según los medios japoneses, Corea del Norte notificó a la Organización Marítima Internacional (OMI) la intención de efectuar el lanzamiento de un satélite entre el 31 de mayo y el 11 de junio.

Según las previsiones, las etapas del cohete norcoreano caerían en el mar Amarillo, al suroeste de Corea del Norte, o en el mar de la China Oriental y el Pacífico, al este de Filipinas, áreas que se sitúan fuera de la zona económica exclusiva de Japón. No se descarta, sin embargo, que el cohete sobrevuele las aguas próximas a las islas Sakishima, al sur del archipiélago japonés, como sucedió en diciembre de 2012 y en febrero de 2016.

El ministro de Defensa de Japón, Yasukazu Hamada, dio la orden de derribar el cohete norcoreano en caso de que represente una amenaza para el territorio nacional.

(sputniknews)