En su más reciente entrega de “Tubazos”, el periodista venezolano Eligio Rojas habló sobre los responsables de suministrar armas a los grupos de delincuencia organizada en el país, específicamente a la banda conocida como el “Tren de Aragua”.

Detalló que actualmente hay dos militares procesados por proporcionar armamento a esta organización criminal: el sargento mayor de tercera de la Aviación Isaí David Espinoza Arevalo, 36 años de edad, y el teniente coronel del mismo componente Carlos Daniel Olivo Aparicio de 45 años de edad.

Ambos sujetos estaban adscritos a la Base Aérea Mariscal Sucre, específicamente al Servicio de Armamento, lugar donde se mantenía bajo cuidado y resguardo las armas pertenecientes a su comando.

Según el expediente, Espinoza Arevalo y Olivo Aparicio entraron en contacto con un sujeto apodado “Willian Chu”, quien estaba recluido en el Internado Judicial de Aragua, ubicado en Tocorón.

Dicha persona era uno de los enviados del líder negativo de la Cárcel de Tocorón, lugar considerado la base de operaciones del “Tren de Aragua”.

Señaló que alias “William Chu” les manifestó a los dos militares su interés en adquirir armas de fuego de diversos modelos y calibres, así como municiones.

Explicó que las negociaciones se dieron en dos ocasiones, una de ellas en septiembre de 2020 cotizando las armas de la siguiente manera: cada fusil AK-103 en la cantidad de 4.000 dólares y cada arma de fuego tipo pistola en la cantidad de $300$, según las investigaciones.

De acuerdo con el expediente, las armas fueron entregadas a los privados de libertad, “los cuales se desplazaban en vehículos tipo ambulancia para despistar a los órganos de seguridad del Estado, reuniéndose en las, adyacencias del Centro Comercial Los Aviadores y en empresas reconocidas apostadas en esta ciudad de Maracay, estado Aragua, lugares donde canjeaban las armas y eran entregadas las cantidades de dinero exigidas en moneda extranjera (dólares)”.

Además, añade el documento, “por concepto de dichas ventas fue entregada como parte de pago un vehículo tipo camioneta marca Jeep, modelo Cherokee”, el cual estaba en posesión del ciudadano Espinoza Arevalo, al igual que la cantidad de $16.000”.

Rojas agregó que una de las últimas entregas realizadas fue por 12 fusiles AK-103 y la cantidad de 10 pistolas, recibiendo la suma de 48.900 dólares en efectivo, de los cuales $20.000 le correspondieron a Espinoza Arevalo y $28.000 a Olivo Aparicio, refiere el expediente nº 5j-3367-21

El periodista comentó que los hechos fueron descubiertos luego de que entre finales de 2021 y 2022, desde la Cárcel de Tocorón arreciaron las llamadas extorsivas, donde se amenazaban a las víctimas, previamente estudiadas, para exigirles determinada cantidad de dinero para no atentar contra su familia. Tal situación fue investigada por funcionarios adscritos a la División Nacional Contra Extorsión del Cicpc, quienes comenzaron las labores de campo y análisis telefónicos a la base de datos utilizados frecuentemente por los privados de libertad implicados en las extorsiones. 

Precisamente, en ese análisis telefónico salió a relucir el nombre de los dos militares como presuntos responsables de ventas de armas entre agosto y noviembre de 2020 a los cabecillas de esa estructura delincuencial que opera en la Cárcel de Tocorón.

Detalló que el cruce de llamadas refleja comunicaciones entre Espinoza Arevalo y un sujeto dentro de la cárcel apodado “Junni”; pero también hay una abundante comunicación con otro sujeto llamado “Joan Inmueble”, quien se encuentra en las zonas mineras del estado Bolívar. 

Mediante estos hallazgos, resultaron detenidos ambos militares en noviembre de 2020; Espinoza Arevalo fue detenido mientras se desplazaba en un vehículo que había recibido como forma de pago por las armas entregadas al liderazgo negativo de la Cárcel de Tocorón.

Una vez capturados, los agentes del Cicpc procedieron a efectuar un allanamiento a su residencia ubicada en Guasimal, sector Las Casitas, municipio Girardot (Maracay), estado Aragua. Allí incautaron la cantidad de 21 cargadores de fusil AK-103 y la cantidad de 19.500 dólares en efectivo, ocultas en una de las habitaciones.

Por su parte, la residencia del teniente coronel Carlos Daniel Olivo Aparicio, ubicada en Cagua, estado Aragua, también fue objeto de allanamiento. Allí consiguieron 14 máquinas minadoras de bitcoin, las cuales mantenían en el interior de la vivienda sin poder justificar su licitud ni acreditar su posesión.

La Fiscalía 31 del Ministerio Público Aragua, a cargo de Adolfo La Cruz, imputó a los detenidos por tráfico de armas y municiones. El juicio transcurrió desde el 16 de septiembre de 2021 hasta el 10 de diciembre de ese mismo año.

La jueza quinta de juicio de Aragua, Zoe Montañez Gámez, encontró culpable al sargento mayor de tercera Isaí David Espinoza y en consecuencia lo condenó a cumplir 22 años y seis meses de prisión. Mientras que el sargento mayor de tercera Carlos Daniel Olivo fue encontrado no culpable y, por ende, quedó absuelto.

Ahora bien, la sentencia condenatoria contra Espinoza Arevalo fue anulada por la Corte de Apelaciones de Aragua el 4 de julio de 2022.  Dicha decisión fue firmada por los siguientes jueces: Pedro Rafael Solórzamo Martínez, Michel Mijail Pérez Amaro y Elligsen Rchelle Bregon Martínez, quienes ordenaron celebrar un nuevo juicio.  

Los jueces argumentaron la decisión afirmando que la juez de juicio no explicó el por qué quitó el delito de asociación para delinquir, pues aseguran que el militar no pudo haber cometido el delito solo, tuvo que asociarse con alguien.

Ahora bien, Rojas destacó que el expediente fue declinado ante un tribunal con competencia en terrorismo. Afirmó que con esta decisión es posible que el tribunal antiterrorista reinicie el proceso penal contra estos dos militares acusados de venderle armas al “Tren de Aragua”.

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(LaIguana.TV)