Tal día como hoy en el año 1783, nace en Caracas, el libertador, Simón José Antonio de la Santísima Trinidad Bolívar Palacios y Blanco, quien fue un militar y político de la época pre-republicana de la Capitanía General de Venezuela, fundador de la Gran Colombia y una de las figuras más destacadas de la emancipación americana frente al Imperio español.
Para ese entonces, Venezuela era una Capitanía General del Reino de España, en cuya población se respiraban resquemores por las diferencias de derechos existentes entre la oligarquía española dueña del poder, la clase mantuana o criolla, terratenientes en su mayoría, y los estratos bajos de pardos y esclavos.
A pesar que la mayoría de los venezolanos, conocen la historia de este gran héroe patrio, es importante nombrar que sus padres fueron el Coronel Juan Vicente Bolívar y Ponte, y Doña María de la Concepción Palacios y Blanco, a quienes perdería a temprana edad (9 años) y quedando a cargo de su tío Carlos Palacios y su esclava y nodriza, la Negra Hipólita.
Asimismo, su educación fue encargada a Simón Rodríguez, quien lo inició en el estudio de los enciclopedistas franceses. También participaron en su proceso de enseñanza el Fray Jesús Nazareno Zidardia, el presbítero José Antonio Negrete, Guillermo Pelgrón, Andrés Bello y el Fray Francisco de Andújar.
Con un gran espíritu patrio y libertario, Bolívar regresa a Venezuela en 1806, luego de haberse marchado a Madrid (España) cuando solo tenía 15 años de edad, con la firme intención de lograr la independencia del imperio español y formar una gran confederación que uniera a todas las antiguas colonias españolas de América, para enfrentar el poderío de otras potencias imperialistas como Estados Unidos.
En 1810, Participó activamente en los movimientos independentistas iniciados por Miranda, aunque posteriormente tuvo que exiliarse a Cartagena de Indias en 1812, desde donde escribió el «Manifiesto de Cartagena. Memoria dirigida a los ciudadanos de la Nueva Granada por un caraqueño».
Seguidamente, en 1814, se ve obligado a exiliarse en Jamaica tras el resurgimiento de las fuerzas realistas en Venezuela. Desde allí, escribiría la «Carta de Jamaica» donde afianzaba su ideal de unión y hermandad entre los pueblos americanos. Vuelve a Venezuela para el año 1816.
Luego de intensas y difíciles luchas por organizar el país, el Libertador establece el 15 de febrero de 1819, el Congreso de Angostura y el primer proyecto de Constitución.
Este héroe patrio es conocido, por libertar cinco países de Sur América del colonialismo español, las cuales fueron: Colombia, Bolivia, Perú, Ecuador y Venezuela.
En 1830, se traslada a Bogotá para instalar el Congreso Constituyente a pesar de encontrarse enfermo. Pero la fuerte oposición a sus ideales y la repentina muerte de su amigo y compañero de armas, el Gran Mariscal Antonio José de Sucre, le obligan a renunciar a la Presidencia de la Nueva Granada y se traslada a Santa Marta, donde fallece a la una en punto de la tarde del 17 de diciembre de 1830. Dejando así de existir, el Libertador de cinco naciones. Muy pocas personas le acompañan en el momento de exhalar el último suspiro.
Así murió el que todo lo dio por la libertad de su patria. Pero quien también aún continúa más vivo que nunca en cada uno de los venezolanos que agradecen y siguen el legado de un revolucionario independentista, ideales que lo llevaron a luchar por la libertad no solo del pueblo venezolano sino de muchos países más, para desprendernos del yugo español y consolidar la patria grande que tenemos hoy en día.
(LaIguana.TV)
