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El pasado viernes 17 de julio la intelectualidad venezolana de izquierda fue sacudida tras anunciarse el vil asesinato del historiador Jorge Mier Hoffman, ocurrido en la ciudad de Pampatar del estado Nueva Esparta. Según reportes oficiales, y sobre todo de acuerdo a la versión que ha circulado a través de los diversos medios nacionales, el homicidio de este académico, de 64 años de edad, habría tenido como móvil principal el sicariato.

 

Esta muerte, cabe destacar, habría sido ordenada por el empresario Marcelo Prado del Carpio y por la esposa del mismo, Ingrid Cecilia Ball Goubat, con quienes el occiso sostenía un conflicto inmobiliario y quienes hasta el día de hoy se encuentran prófugos de la justicia.

 

Aunque este argumento, por común, ha logrado convencer a la mayoría, el crimen antes citado, no obstante, ha dejado tras de sí una serie de interrogantes e inquietudes. A continuación una breve reseña al respecto:

 

El primer dato curioso en torno a Mier Hoffman tiene que ver con su empeño en investigar, como especialista en la vida de Simón Bolívar que era, las verdaderas causas de la muerte de nuestro Libertador. Gracias a este intelectual, es necesario destacar, se habían iniciado una serie de investigaciones sobre la supuesta tesis según la cual Bolívar falleció como consecuencia de un envenenamiento y no debido a una enfermedad.

 

Por otra parte, y este es el dato más curioso, se sabe también que este historiador se había empeñado de un tiempo para acá a investigar las verdaderas causas del fallecimiento del Comandante Hugo Rafael Chávez Frías. Este asesinato, y así lo sugiere el articulista Rafael Guillén Beltré, pudo haberse cometido para que Mier Hoffman no concluyera dichos estudios y para que no revelara, por ende, el misterio que rodea la dolorosa muerte del líder revolucionario.

 

Guillén Beltré, es necesario referir, este mismo martes 4 de agosto, a través de su artículo «Jorge Mier Hoffman: Un crimen para tapar asesinos de Hugo Chávez», publicado por el portal Aporrea.org, responsabilizó del homicidio a los mismos cuadros de traidores que se encuentran detrás de los heroicos hombres y mujeres que han impulsado el sistema socialista en América Latina. Los mismos, destacó, se están encargando de eliminar a todo aquel que se atreva a pedir una investigación profunda sobre la enigmática enfermedad de Chávez.

 

Conspiranoia, realidad contundente o simple dato curioso. Muchas versiones pueden comenzar a tejerse en torno a este muy lamentable acontecimiento. Lo importante, ante todo, es no guardar silencio. Cuando un argumento no convence o cuando demasiados elementos turbios se mezclan (como sucede en este caso), se hace indispensable analizar el asunto con detenimiento. ¡De que vuelan, vuelan!

 

(LaIguana.TV)