El Gobierno de Sudáfrica se refirió a los constantes bombardeos del Ejército de Israel contra territorio libanés como «una violación a la soberanía y al derecho internacional humanitario», días después de que varios países condenaran a Tel Aviv por haber atacado a los Cascos Azules de las Naciones Unidas.
A más de dos semanas de que se intensificaran los ataques de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) contra el Líbano, Sudáfrica se pronunció al respecto e hizo un llamado a la comunidad internacional a no permanecer indiferente ante tal situación.
«El bombardeo israelí del Líbano es una grave violación del territorio de un Estado soberano y una grave violación del derecho internacional. La comunidad internacional no puede permitirse permanecer indiferente, declaró en un comunicado», declaró el Ministerio de Relaciones Exteriores y Cooperación del país africano en un comunicado.
La Cancillería sudafricana recordó que los bombardeos israelíes han dejado miles de muertes civiles, incluso en la capital Beirut, donde, al igual que en otras ciudades, los ataques alcanzaron barrios residenciales.
También destacó que las incursiones terrestres de las FDI en el Líbano han violado la llamada Línea Azul, demarcación establecida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que sirve de frontera de facto y provisional entre Israel y Líbano a falta de una reconocida y definitiva. Además, Sudáfrica condenó que las fuerzas del país hebreo hayan atacado en días anteriores a las fuerzas de paz de las Naciones Unidas.
«Sudáfrica subraya que los ataques contra las fuerzas de mantenimiento de la paz son una grave violación del derecho internacional humanitario», se lee en el comunicado.
Finalmente, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Sudáfrica llamó a que la comunidad internacional y el Consejo de Seguridad de la ONU sean coherentes con la defensa del derecho internacional y del derecho internacional humanitario.
«Sudáfrica pide el fin inmediato de la campaña de bombardeos, ya que, cuanto más dure la guerra, mayor será el riesgo de que la región se convierta en una gran conflagración militar, lo que supondría una grave amenaza para la paz y la seguridad internacionales», expresó.
Los ataques de Israel contra el Líbano han dejado hasta la fecha 2.255 muertos y 10.524 heridos, según el Centro de Situaciones de Emergencia del Ministerio de Salud libanés.
Israel y el Líbano se encuentran en una guerra no declarada desde el 8 de octubre de 2023, cuando la milicia chií libanesa Hizbulá comenzó a lanzar misiles y drones suicidas hacia las comunidades del norte de Israel como gesto de solidaridad con el movimiento palestino Hamás tras su incursión armada en Israel, que, a su vez, respondió a cada ataque. Decenas de miles de israelíes residentes en el norte fueron desplazados a otras zonas del país.
Sudáfrica interpuso una demanda contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en diciembre de 2023, por presuntos delitos relacionados con el genocidio del pueblo palestino en la Franja de Gaza, enclave donde han muerto más de 42.000 personas debido a los ataques israelíes, de acuerdo con las autoridades locales gazatíes. A dicha demanda se han sumado varios países.
(Sputnik)
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