Funcionarios estadounidenses han ultimado nuevas sanciones económicas contra Rusia, incluidas medidas bancarias y energéticas, para intensificar la presión sobre Moscú a fin de que acepte los esfuerzos del presidente de Estados Unidos Donald Trump, para poner fin al conflicto con Ucrania, según tres funcionarios estadounidenses y una fuente familiarizada con el asunto.
Entre los objetivos figuran el gigante energético ruso Gazprom, de propiedad estatal, y entidades importantes de los sectores de los recursos naturales y la banca, dijo un funcionario de la administración, que, como las demás fuentes, pidió el anonimato para hablar del asunto.
El funcionario no dio más detalles.
El Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos «está intentando coordinar algún conjunto de acciones más punitivas contra Rusia», dijo la fuente familiarizada con el asunto. «Esto tendrá que ser aprobado por Trump».
«Es totalmente su decisión», confirmó un segundo funcionario estadounidense.
«Desde el principio, el presidente ha sido claro sobre su compromiso de lograr un alto el fuego total y completo», dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional James Hewitt. «No hacemos comentarios sobre los detalles de las negociaciones en curso».
El Tesoro de Estados Unidos, que aplica la mayoría de las sanciones estadounidenses, no respondió a una solicitud de comentarios.
La aprobación de nuevas sanciones por parte de Trump, que seguiría a la firma el miércoles de un acuerdo sobre minerales entre Estados Unidos y Ucrania que él promovió intensamente como parte de su esfuerzo de paz, podría significar un endurecimiento de su postura hacia el Kremlin.
Desde que asumió el cargo en enero, Trump ha tomado medidas consideradas destinadas a impulsar la aceptación rusa de su esfuerzo de paz, incluida la disolución de un grupo de trabajo del Departamento de Justicia formado para hacer cumplir las sanciones y perseguir a los oligarcas próximos al Kremlin.
También ha hecho declaraciones pro-Moscú, culpando al presidente ucraniano Volodymyr Zelenskiy de iniciar el conflicto y llamándole «dictador».
Mientras tanto, Steve Witkoff, enviado especial de Trump, ha defendido una estrategia de paz que cedería cuatro regiones ucranianas a Moscú, y se ha reunido con Putin cuatro veces, la última la semana pasada.
Las sanciones secundarias son aquellas en las que un país intenta castigar a un segundo país por comerciar con un tercero prohibiéndole el acceso a su propio mercado, una herramienta especialmente poderosa para Estados Unidos debido al tamaño de su economía.
(Foxnews)
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