Las manipulaciones y ataques contra la Revolución Bolivariana, el gobierno de Nicolás Maduro, las instituciones estatales, líderes del proceso y a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana se acentúan cada día más; y es que los medios de comunicación tanto nacionales como extranjeros arrecian sus maniobras de manipulación, falsedad y engaño.
En esta oportunidad, el diario norteamericano «El Nuevo Herald» fustiga a Venezuela y victimiza al Gobierno colombiano responsable de dar respuesta y protección a su pueblo, de los cuales se han olvidado por décadas. En este orden de ideas, en la actualidad el referido medio publica un artículo titulado “Maduro castiga a Colombia para proteger al Cartel de los Soles”.
Según reseña el diario, la vigente disposición de la nación neogranadina de entregar a las autoridades de Estados Unidos a dos supuestos narcotraficantes que actuaba con el llamado “Cartel de los Soles” (venezolano) coacciona el estado dentro de ciertos dirigentes, que son los “más poderosos dentro del chavismo,(…) las extradiciones son la principal razón que llevó al gobernante Nicolás Maduro a emprender la deportación masiva de colombianos en la frontera.”
En este sentido, también se agrega que desde Caracas se “ejercen presiones” ante las entregas, suscritas por el jefe de Estado Juan Manuel Santos, ya que esto pudiera apresurar los procesos que efectúan organismos judiciales estadounidenses, relacionados a las probables movimientos del “cartel de droga venezolano, presuntamente operado por militares de alto rango y por dirigentes claves del chavismo”.
Por otro lado, añaden que Santos, sancionó las extradiciones al país del norte de los colombianos Gersaín Viáfara Mina, conocidos bajo el seudónimo “Eliseo”, y del “empresario” Óscar Hernando Giraldo Gómez, este último es calificado por medio El Tiempo, como “el testigo estrella que destapará el Cartel de los Soles”.
«El Nuevo Herald», cita una fuente no identificada, la cual da a conocer que estas actuaciones de Santos originan un “gran dolor de cabeza para los funcionarios colombianos en vista de las fuertes presiones que estaban siendo ejercidas por Venezuela (…) Estos eran los operadores de narcotráfico del Cartel de los Soles (…) Y la cancillería venezolana y el gobierno (de Venezuela) también lo hizo a través de canales informales, les planteó que dejaran de extraditar gente a Estados Unidos, que ‘maliciosamente le quiere hacer daño a la revolución”, destaca el declarante.
Entre otras afirmaciones de las “fuentes” citan “que el régimen de Venezuela está haciendo uso de las deportaciones masivas de colombianos para tratar de obligar a Santos a detener las extradiciones de Viáfara y de Giraldo, así como de otros narcotraficantes detenidos en Colombia que también poseen información sobre el Cartel de los Soles”.
Ante lo expuesto, medios como «El Nuevo Herald» buscan con este tipo de publicaciones enlodar las medidas que el Presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, implementó. Lo establecido tiene como finalidad proteger al pueblo venezolano y también al colombiano puesto que también ha sido sometido a la barbarie del paramilitarismo, trata de menores, entre otros graves delitos de los cuales el Gobierno del vecino país ha ignorado por años.
Venezuela ha exhibido pruebas irrefutables de la realidad en la frontera de ambos países, realidad que ha sido ocultada por estas corporaciones de la comunicación. Por qué no mencionan, se solidarizan o denuncian los desalojos que para mayo de este año, por ejemplo, vivieron colombianos y que algunos portales digitales como «Radio Contagio» publicaron y que a continuación citamos:
“En Medellín continúan los desalojos forzosos de las familias más pobres de esta ciudad. Esta vez se trata del barrio Villa Café, donde esta mañana desde las 6:30, 1500 personas de estratos 0 y 1 han sido desalojados a manos de 1000 agentes de la policía, que han usado la violencia para lograr desplazarlos”.
Este es solo un caso de los tantos que vive el pueblo humilde, campesino de Colombia, que no son difundidos porque no son de utilidad nacional, pero hoy Venezuela en defensa de su soberanía y en cumplimento de tratados internacionales garante del respeto de derechos humanos exige respeto; no obstante hoy estas corporaciones de la comunicación usan a estas personas deportadas, se valen de las circunstancias para mostrar lo que no es.
Al parecer se han tocado intereses económicos, políticos, sociales de poderosos y de la burguesía colombiana .Los ataques antes lo decretado por el Ejecutivo venezolano se va acentuando y la guerra mediática no descansa; por esto Maduro llamó este viernes al pueblo venezolano a estar alerta ante las manipulaciones de la prensa de la nación vecina.
(LaIguana.TV)
