El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, ha señalado este martes que el posible suministro de misiles de crucero estadounidenses Tomahawk al régimen de Kiev representaría una importante escalada de tensiones.
De este modo, el vocero comentó la reciente declaración del presidente de EEUU, Donald Trump, que al abordar el tema este lunes dijo que «en cierto modo» tomó la decisión correspondiente, sin revelar cuál es. Peskov señaló que se tendría que «esperar declaraciones más claras, si las hay».
«Reitero que en cuanto a las entregas de armas [estadounidenses], primero se llevan a cabo y luego se hacen las declaraciones. Al menos, eso siempre ha sido así bajo la Administración Biden», recordó el portavoz. «Ya veremos cómo será esta vez», agregó.
«Seria escalada de tensiones»
En cuanto a la postura de Moscú al respecto, Peskov señaló que fue expresada «con total claridad» por el presidente ruso, Vladímir Putin, durante su intervención en el Foro Internacional de Discusiones Valdái la semana pasada.
«Allí, todo fue dicho claramente: esto será una seria escalada de tensiones que, al mismo tiempo, no podrá cambiar la situación en el frente para el régimen de Kiev», indicó.
Asimismo, Peskov hizo hincapié en que en esta situación «es importante entender» que los misiles Tomahawk también pueden portar una carga nuclear.
«Dejando de lado los detalles, estamos hablando de misiles que también podrían tener capacidad nuclear. Por lo tanto, esta es realmente una seria escalada de tensiones», concluyó.
Producción limitada y escasez de plataformas terrestres
La semana pasada, Reuters publicó la opinión de un funcionario estadounidense y otras fuentes que señalaron que el suministro de Tomahawks a Ucrania no era una opción «viable», porque los inventarios actuales de estos misiles «están comprometidos con la Armada de EEUU y otros usos».
La agencia hacía referencia a documentos presupuestarios del Pentágono, según los cuales la Armada del país había adquirido hasta ahora 8.959 Tomahawks a un precio promedio de 1,3 millones de dólares por unidad y planeaba comprar otros 57 en 2026. Cabe mencionar que la producción de estos misiles de crucero ha oscilado entre 55 y 90 unidades por año.
Además, los Tomahawks se han lanzado tradicionalmente desde plataformas marítimas y aéreas, mientras las plataformas terrestres existentes en el Ejército de EE.UU. no son «lo suficientemente móviles» para satisfacer las necesidades de movilidad y agilidad de un conflicto moderno, apunta Naval News.
El programa más moderno de plataformas terrestres para Tomahawk (LRF) fue cancelado este año, mientras se planea «resucitarlo» en unos ejercicios de fuego real en Filipinas no antes del año que viene.
Este 2 de octubre, Putin advirtió que el posible envío de Tomahawk desde EEUU a Ucrania significaría una nueva etapa en la escalada del conflicto, así como en las relaciones entre Washington y Moscú.
Además, el presidente ruso subrayó que la potencial entrega «no cambiará, en absoluto, la correlación de fuerzas en el campo de batalla». Si bien el mandatario reconoció que estos misiles podrían ocasionar daños, indicó que estos se verían anulados por las mejoras en los sistemas de defensa aérea de Rusia.
Asimismo, recalcó que el uso de los Tomahawks es imposible sin la participación directa de fuerzas estadounidenses, por lo que ese paso involucraría a Washington directamente en el conflicto.
En este contexto, el exasesor del secretario de Defensa de EEUU, Douglas Macgregor, afirmó que si el régimen de Kiev utiliza estos misiles de crucero estadounidenses para atacar el interior de Rusia, EEUU estaría en guerra con Rusia «en cuestión de horas».
(RT)
Más noticias y más análisis de LaIguana.TV en YouTube, X, Instagram, TikT
También para estar informado síguenos en:
Telegram de Miguel Ángel Pérez Pirela https://t.me/mperezpirela
Telegram de Laiguana.tv https://t.me/
WhatsApphttps://whatsapp.com/
El portal de Venezuela.