Este lunes 1 de diciembre diversos medios de comunicación, tanto nacionales como internacionales, informaron sobre una supuesta reunión de alto nivel que tendría lugar ayer mismo en la Casa Blanca. En la misma, supuestamente, se decidiría la suerte de Venezuela.
Esta habría sido convocada de urgencia por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En ella, al parecer, participaron el secretario de Estado, Marco Rubio, el secretario de Guerra, Pete Hegseth, el jefe del Estado Mayor Conjunto, Dan Caine, entre otros funcionarios de alto rango.
La intención de esta convocatoria era la de definir las próximas estrategias de presión contra el gobierno venezolano, para lograr lo que tanto ha anhelado el régimen gringo en los últimos 26 años: acabar con la Revolución Bolivariana.
Hasta el momento, se desconocen los resultados de dicha reunión, pues ninguna autoridad yanqui y ningún medio de comunicación ha informado sobre ello.
En una nota difundida por la agencia Reuters, en la que se notificó sobre el término del citado encuentro, se señala que “el funcionario que habló, bajo condición de anonimato, indicó que la reunión en la Oficina Oval incluyó a altos miembros del equipo de seguridad nacional de Trump”. “No se dieron a conocer detalles de las conversaciones de inmediato”, destaca el texto.
Para diversos analistas, el silencio que reina en la administración Trump, que se ha caracterizado en sus dos mandatos por vociferar a los cuatro vientos sus intenciones contra nuestro país, lo que deja entrever es que la estrategia de presión que han mantenido en las últimas semanas contra el gobierno nacional y el pueblo venezolano, ha sido un total fracaso.
Así lo manifestó el analista internacional Vladimir Adrianza, en la edición de este martes 2 de diciembre del programa Aquí y Ahora, que conduce el periodista Julio Riobó y es transmitido por Laiguana.tv.
Adrianza aseguró que Estados Unidos “está perdiendo esta batalla que ellos mismos han asumido”. “Son cinco administraciones que se han propuesto acabar con la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y acabar con los gobiernos que la han ejecutado. Definitivamente, Trump está desesperado porque ninguna de sus promesas de campaña las ha podido cumplir”, afirmó el entrevistado.
Señaló también queda claro que en la Casa Blanca no hay una unidad de mando, como sí lo hay en Venezuela, sino que hay fracturas internas que afectan el funcionamiento de este.
El analista y exdiplomático Sergio Rodríguez alertó sobre este último punto hace varias semanas, durante una entrevista que concedió al periodista William Castillo en el programa Los Mediodías de Laiguana.tv. En el mismo, afirmó que “Estados Unidos no es un gobierno, es una administración que tiene varios gobiernos y que cada uno opera a partir de intereses particulares”.
Vale recordar que hace pocos días el mandatario yanqui confirmó que habría sostenido una conversación telefónica con el presidente de la República, Nicolás Maduro; sin embrago, no dio detalles de lo hablado.
Horas después, el pasado fin de semana, el propio magnate informó que había ordenado el cierre del espacio aéreo venezolano, lo que supondría un bloqueo total a nuestro país, dado que ningún avión podría entrar o salir de él.
No obstante, el propio Trump, que un día amenaza con acabar con medio planeta y al siguiente se muestra al mundo como un dócil corderito, se contradijo al pedir al gobierno de Venezuela que acepte la reanudación de vuelos de repatriación de connacionales, que él mismo suspendió al cerrar el espacio aéreo venezolano.
El portal Laiguana.tv lo reseñó de la siguiente manera: “La Autoridad Aeronáutica de Venezuela informó este martes 2 de diciembre que ha recibido la solicitud del gobierno de Estados Unidos (EEUU) para reanudar los vuelos de repatriación de migrantes desde ese país hasta Caracas”.
Para Vladimir Adrianza, este tipo de situaciones demuestra que el imperio estadounidense está en decadencia. “Ya no pueden hacer todo lo que ellos quieren en el planeta y se están jugando particularmente aquí en Venezuela un capítulo especial. Por primera vez estamos jugando en las ligas mundiales, porque aquí en Venezuela se va a dirimir si un país de la periferia occidental es capaz de hacerle frente a una potencia en declive, como los Estados Unidos, en su intento por ser el hegemón planetario”.
Mientras tanto, en suelo patrio y de forma paralela a la reunión que sostuvo Trump con su equipo de guerra, el presidente Maduro le enviaba un mensaje: “Le tengo malas noticias al imperio: no es un hombre, es un pueblo vergatario dispuesto a defender la patria”:
(Laiguana.tv)
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