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Este martes, un nefasto crimen ocurrió en horas de la noche en la finca La Esmeralda, asentada en La Blanquita, al sur del estado Táchira, cuando un hombre entró al lugar para agredir a machetazos a una mujer y a miembros de su familia, dejando un muerto y a 4 de ellos gravemente heridos.

 

El hombre que resultó muerto era un importante líder chavista de la comunidad que se desempeñaba como vocero pricipal de su consejo comunal: Luis Hernando Lázaro Chávez.

 

De acuerdo a un comunicado difundido por la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora (CRBZ) se han venido cometiendo horrendos crímenes contra dirigentes chavistas y los disfrazan como asuntos familiares o crímenes pasionales cuando en realidad se presume que es una estrategia paa desmovilizar a las bases militantes con modus operandis paramilitares.

 

A continuación lea el comunicado de la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora y conozca quien era el líder chavista:

 

La Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora (CRBZ), movimiento social, revolucionario, patriota y chavista, denuncia con la fuerza de la rabia contenida, el horroroso crimen cometido contra nuestro compañero militante Luis Hernando Lázaro Chávez, quien fue brutalmente asesinado en el día de ayer a manos de delincuentes inoculados en tierras tachirenses, supuestos desmovilizados del conflicto colombiano.

 

En horas de la noche de ayer, martes 6 de octubre de 2015, y aprovechando la oscuridad los ciudadanos colombianos Duvan Guevara Navarro y Olimpo Guevara Torres cortaron la energía eléctrica de la casa familiar rural de nuestro compañero Luis Lázaro en el sector La Argentina de la Comuna Alí Primera III, en el municipio Fernández Feo del estado Táchira. Con total impunidad ingresaron al hogar y a “machetazo limpio” acabaron con la vida de un hombre chavista, dedicado a su familia y vocero principal de su consejo comunal.

 

En el mismo acto de tamaño horror, hirieron de gravedad a una de sus hijas y mutilaron la mano (cortándole sus dedos) a un niño menor de edad que se encontraba en el domicilio.

 

Los motivos, al igual que en los casos de otros comuneros asesinados este mismo año en la Comuna Negro Primero (Carabobo), son disfrazados como “cuestiones familiares”, pero detrás de estas mentiras se esconde la misma estrategia: infiltrarse en las comunidades organizadas, amedrentar a la población con amenazas para su desplazamiento, detectar a los líderes chavistas comunitarios y acabar con sus vidas con métodos criminales y de horror. Terrorismo puro.

 

Lamentablemente, los criminales salieron del sector, pero no fueron apresados y hasta el momento no son investigados por las fuerzas de seguridad, por lo tanto, pueden estar circulando con total impunidad por nuestro país.

 

Nuestro Compañero no sólo era vocero administrativo de su consejo comunal (La Argentina), sino que también era la persona que con su propio vehículo personal y con mucho esfuerzo (la zona se encuentra en el sector rural casi sin vías de comunicación) lograba llevar una vez cada 8 días un pequeño mercalito comunal para abastecer a sus vecinos. No eligieron a cualquier víctima, sino que sabían lo que hacían. No sólo perdemos un gran líder, también las familias que allí se encuentran verán interrumpido su derecho a la seguridad alimentaria.

 

Desde la CRBZ condenamos este terrible hecho, y exigimos a las autoridades locales, regionales y nacionales que coloquen a disposición, de forma urgente, todas las fuerzas sociales y de seguridad, así como también todos los órganos de justicia competentes para encontrar, investigar, juzgar y encarcelar a los criminales que no sólo son autores materiales de este hecho, sino que además pertenecen a grupos irregulares de la zona de la troncal 5 en el Táchira.

 

Exigimos todo el peso de la ley para acabar definitivamente con estos elementos perturbadores de la paz venezolana, que tienen como objetivo caotizar, desmovilizar a la población organizada y atacar al chavismo.

 

El paramilitarismo y el sicariato no son una amenaza futura, son prácticas y elementos de la realidad con los cuales conviven y sufren nuestros compañeros y compañeras en la frontera y en otros territorios comunales de todo el país. Es importante que reconozcamos que esta problemática no se resuelve sólo con el cierre de la frontera, sino con el desarrollo de la Milicia Nacional Bolivariana y el empoderamiento de un pueblo aguerrido que no permitirá que estos crímenes se sigan cometiendo en nuestro territorio soberano e independiente.

 

(LaIguana.TV/Agencias)