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Guillermo Bermejo tiene 40 años, estudió Derecho durante varios semestres pero los problemas, como él mismo señala, no se hicieron esperar. Y es que para cualquier militante en el Perú, la falta de espacios para la participación democrática, la criminalización constante a la lucha social y la persecución política, son realidades dolorosas y cotidianas que parecen haberse normalizado. Ahora asesora a comunidades en lucha por sus territorios y por sus derechos.

 

Bermejo se encuentra tramitando su solicitud de asilo político ante la cancillería venezolana en Caracas, ansiando su retorno al Perú donde lo espera la campaña electoral. Nuestro equipo periodístico se entrevistó con este luchador peruano, y a través de él conocimos más de la realidad de esta hermana patria.

 

A: ¿Cuáles son los motivos de tu exilio y de tu estadía en Caracas en particular?

 

G.B: Me encuentro en tierra venezolana hace unos meses ya. Vine porque actualmente estoy enfrentando el segundo proceso judicial en mi contra, en el cual una vez más me acusan de terrorista. La historia es muy larga e indignante pero tratare de ser preciso. Debido a la campaña de criminalización que existe contra la lucha política y social en el Perú y a la falta de superación de nuestra historia reciente de guerra y odio, todo aquel que resulte incómodo para las élites políticas es terrorista. En el 2006 sufro el primer proceso judicial, acusado de participar en una conspiración contra la embajada estadounidense. No vale la pena entrar en los detalles de esta farsa, la cual se cayó de ridícula e insostenible. Lo que si te puedo decir es que es lamentable todas las vejaciones y calumnias que tuve y tengo que pasar. En el actual segundo proceso fui acusado por la DIRCOTE (Dirección Contra el Terrorismo) de haberme reunido con Quispe Palomino, quien es actualmente dirigente de lo todavía sobreviviente de Sendero Luminoso. En este proceso fui apresado en un primer momento por 15 días, de manera completamente ilegal. En realidad fue una operación tipo secuestro. De hecho durante los días que estuve preso mi abogado no pudo acceder al expediente, ni siquiera para empezar a armar los argumentos de la defensa. Fueron 15 días de aislamiento en condiciones infrahumanas.

 

A: ¿Por qué se te acusa de haberte reunido con este personaje? ¿Cuáles son las razones de esta campaña en tu contra?

 

G.B: Yo quiero aclarar que siempre he luchado por las comunidades indígenas y campesinas desde la legalidad. Creo en la necesidad de hacer política de manera publica y abierta y no estoy en esos secretismos que se han quedado atrás. La verdadera razón de esta nuevo proceso judicial es la denuncia que hemos venido sosteniendo las comunidades del VRAEM (Valle de los Rios Apurimac, Ene y Mantaro) al sur del Perú que es una zona asediada por la violencia y la pobreza. Yo me fui a vivir a allá comprometido con ayudar a visibilizar estas luchas. Me fui porque desde el 2013 amigos cercanos y compañeros de lucha nos empezamos a informar sobre los proyectos de construcción de un aeropuerto militar en la zona. Es muy interesante la anécdota de como los lugareños empezaron a notar que algo raro estaba pasando, ya que nos cuentan que un día vieron muchos militares, entre ellos muchos marines, tomando muestras del suelo. Como ellos subestiman la inteligencia de los campesinos y los indígenas pensaron que podrían construir ahí los que le diera la gana. Pues no, nosotros nos informamos y nos lanzamos por todo el país, y por toda América Latina a denunciar este proyecto de base militar gringa, que forma parte de la estrategia del comando sur. Estas y otras luchas nos llevaron a construir un liderazgo independiente, y un renombre en todo el país. Yo creo que hay mucho temor, mucho temor por las venideras elecciones presidenciales

 

A: Cuéntanos un poco de la actual coyuntura del Perú y del próximo proceso electoral

 

G.B: El Perú vive una realidad dramática de entreguismo y subasta al mejor postor. Para decírtelo solo en cifras: de 75% de la selva peruana está entregada en concesiones de hidrocarburos, sea de petróleo o sea de gas. 20% del territorio nacional ubicado entre la sierra y la costa entregado a exploraciones mineras. En el Perú se están desarrollando mas de 200 luchas sociales que no se han resuelto. Eso te habla también de la traición de Ollanta Humala a la fe y la esperanza de los peruanos y me atrevería a decir de los latinoamericanos, ya que se vendió como una versión peruana de Chávez, de Evo y de Correa. Más de 700.000 niños están fuera del sistema escolar, y la mitad de la población infantil y juvenil sufre de desnutrición, 1 de cada 5 de estos niños desnutridos, tiene desnutrición grave. Tienes el país rematado, si llegas a ver el mapa de concesiones mineras y de hidrocarburos, te da la impresión de que los peruanos vamos a necesitar mudarnos de país. Lima no se salva. El limeño, que cree que todos estos problemas de desplazamiento y explotación es un problema de ¨los indios¨ esta muy equivocado. Humala según la última encuesta tiene el 12% de aprobación y los niveles de corrupción en los negociados con las concesiones mineras que se discuten y concretan en los pasadizos de los ministerios y del congreso de la República, contribuyen con la enorme deslegitimación existente. El narcotrafico ha impregnado a todos los instituciones publicas y políticas del país. No existen partidos del régimen que no tengan al menos un procesado por este flagelo.

 

Con este fracaso rotundo del gobierno de Humala y una izquierda dividida enfrentemos este nuevo proceso electoral.

 

A: ¿Cuáles son las opciones políticas que se disputan el gobierno para las próximas elecciones?

 

G.B: El error de las élites políticas que gobiernan actualmente el Perú es que va a postular a las mismas caras, los candidatos son gente que ya todos conocen Keiko Fujimori, Alan García, Alejandro Toledo y otras opciones con menos apoyo. Pero muchas encuestas arrojan que la mayoría del pueblo peruano espera a alguien nuevo

 

La izquierda se encuentra muy disminuida, en el frente amplio, que componen SEMBRAR, el Partido Socialista y Tierra y Libertad va la candidata Verónica Mendoza, que no goza con más del 1%. Las otras opciones de izquierda ni si quiera aparecen en las encuestas.

 

Por otro lado hay un fenómeno de los últimos años, que nosotros denominamos ¨la izquierda caviar¨ porque son una izquierda que no parece izquierda. Muchos de estos sectores se han desligado del proceso venezolano, tildándolo de dictadura, por las presiones mediáticas y políticas. Incluso algunos de estos sectores que se autodenominan de izquierda han votado en el congreso a favor del ingreso de militares estadounidenses en el país. Tiene una agenda confusa, es un discurso caviar, un discurso de ONG´s.

 

A: Para ir finalizando ¿cuales son tus perspectivas a tu retorno y de tu participación electoral?

 

Cualquier cosa puede pasar en abril del 2016. La izquierda esta muy dividida, eso no es nada nuevo. Keiko Fujimori esta de nuevo punteando las encuestas pero tampoco es nuevo, las encuesta siempre inflan a estas opciones. Lo que es cierto es que el 50% hoy no sabe por quien votar y ese 50% es fundamental. Amplios sectores de movimientos sociales y políticos independientes impulsaron mi candidatura y nos les puedo fallar. Yo creo que es una oportunidad para ir construyendo la nueva izquierda que necesita el Perú, un liderazgo que se plante con valentía en medio de tanto miedo.

 

(Aporrea.org)