Nuevas fotografías del avión ruso repleto de turistas que cayó sobre la península de Sinaí, en Egipto, parecen demostrar que fue derribado con una bomba.
Las imágenes muestran pequeños huecos en los restos del Airbus A321 que podrían ser evidencia de que una bomba explotó en el interior del avión, reseñó DailyMail.
La información sale a la luz luego de que Estados Unidos y fuentes de seguridad europeas sugirieran que el siniestro fue el resultado de una bomba colocada por militantes del grupo terrorista Daesh (autodenominado Estados Islámico).
El Airbus A321 se estrelló el sábado en la península del Sinaí, poco después de despegar de la localidad de Sharm el-Sheikh hacia la ciudad rusa de San Petersburgo. Las 224 personas que iban a bordo murieron.
El Daesh se responsabilizó del siniestro horas después de estrellarse la aeronave y el miércoles reiteró la información, pero dijo que no está “obligado” a explicar cómo derribó el avión.
(Sumarium)
