rumores-C.jpg

La Fiscalía del Distrito Sur del estado de Nueva York confirmó este jueves la detención, por parte de la Drug Enforcement Agency (DEA) estadounidense, de Efrain Antonio Campo Flores, de 29 años, y Franqui Francisco Flores de Freitas, de 30 años; dos venezolanos arrestados en Haití el pasado martes y trasladados a Estados Unidos “con el cargo de conspirar para importar cocaína” a dicho país.

 

Los venezolanos fueron presentados este jueves en una corte federal de Nueva York para escuchar la confirmación de los cargos. No hay información oficial que confirme o niegue si son familiares de algún funcionario gubernamental venezolano. Permanecerán detenidos sin derecho a fianza.

 

Hay numerosas contradicciones en los rumores difundidos: el paradero de los 800 kgs de cocaína es un misterio.

 

Un documento publicado en el sitio web del Departamento de Justicia estadounidense, emitido por la Fiscalía de ese país, informa de la detención y señala que ambas personas deberán presentarse este jueves ante el juez James L. Cott. El documento está firmado por el fiscal Preet Bharara y el agente especial de operaciones especiales de la DEA, Mark Hamlet. También fue publicado un PDF con la acusación hecha por una corte federal.

 

Según el documento, los dos acusados “conspiraron junto a otras personas entre octubre de 2015 y el presente para violar leyes de narcóticos estadounidenses prohibiendo la importación de cocaína. Específicamente, se acusa a Campo Flores y a Flores de Freitas de conspirar para (i) importar cinco kilogramos o más de cocaína a los Estados Unidos desde una nación extranjera; y (ii) distribuir cinco kilogramos o más de cocaína con el conocimiento e intención de que serían importadas a Estados Unidos”. El documento informa que la pena máxima por estos delitos es cadena perpetua.

 

Hasta este jueves en la noche, el gobierno venezolano no ha confirmado o negado de forma oficial si las dos personas señaladas son familiares del Presidente Nicolás Maduro o de su esposa, Cilia Flores.

 

La Casa Blanca también rehusó confirmar la identidad de los dos venezolanos. “No puedo confirmar que hay dos individuos en Haití que han sido arrestados por cargos de que estaban conspirando para traer cantidades significativas de cocaína hacia Estados Unidos, y no puedo confirmar la identidad”, dijo el vocero presidencial estadounidense Josh Earnest al ser cuestionado al respecto.

 

En horas de la noche de este jueves, la agencia EFE informó desde Nueva York que los venezolanos comparecieron por primera vez ante el juez James L. Cott en una corte federal de Nueva York para escuchar la confirmación de los cargos por conspiración para introducción de cocaína en Estados Unidos. Deberán comparecer ante el juez el 18 de noviembre. Permanecerán detenidos en una prisión federal de Nueva York, sin derecho a fianza.

 

El sitio web de Tal Cual publicó, este jueves en la mañana, fotos de los supuestos familiares de Cilia Flores. Pero luego se demostró que las fotos correspondían a dos personas que sostuvieron una riña callejera en un estadio en Estados Unidos, según publicó el sitio web Yahoo.com. Tras difundirse el error, Tal Cual borró los tuits.

 

Así comenzó el rumor

Este miércoles, las versiones sobre la captura de los dos venezolanos fueron esparcidas inicialmente por sitios web como Maduradas.com, DolarToday.com, Runrunes, WSJ.com y la agencia AP. Michael Vigil, exagente de la DEA, fue una de las fuentes más consultadas a pesar de no ser vocero ni agente activo de la organización.

 

Sin embargo, las informaciones cambiaban continuamente. Citando a “fuentes familiarizadas con el caso” y a “una persona con conocimiento del tema”, las noticias emitidas el miércoles por AP y WSJ alegaban que los dos venezolanos fueron capturados en Haití, a bordo de una avioneta Cessna Citation 500 en la cual se transportaban 800 kilogramos de estupefacientes. Del avión, también se dijo que pertenecía a empresarios dueños de las empresas Eveba y Sabenpe. Surgieron discusiones en las redes sociales sobre si un avión de estas características podría hacer el transporte de semejante carga desde Venezuela a Haití.

 

El jueves, la versión fue modificada; la columna RunRunes y el programa “Conclusiones” de Fernando del Rincón aseguraron que los 800 kilogramos de cocaína no fueron transportados en el avión, sino que se encontraban en un barco, yate o catamarán ubicado en República Dominicana. El avión fue liberado y regresó a Venezuela junto a su piloto, copiloto y demás pasajeros, excepto los dos hombres capturados (la cantidad de pasajeros varía según la “fuente”, que en todo momento es anónima; se habla de entre cinco y siete personas en total).

 

El programa “Conclusiones” admitió este jueves que el barco que transportaba los 800 kilogramos de cocaína nunca fue hallado. El paradero de los 800 kilogramos de cocaína es un misterio.

 

Dicho programa de CNN también intentó justificar la violación de espacio aéreo venezolano la semana pasada por parte de un avión estadounidense, argumentando que la aeronave estaba buscando la embarcación. Nuevamente, la fuente es anónima.

 

CNN también dio a entender que se acusó a los dos venezolanos de transportar más de cinco kilogramos de cocaína, aún cuando ―según CNN― ellos llevaban una cantidad mucho menor de drogas como “muestra”. Al parecer, las leyes en Haití exigen que la persona transporte al menos 5 kgs de estupefacientes para poder justificar su extradición.

 

Como puede observarse, la mayor parte de la información consiste de rumores contradictorios y las fuentes son anónimas. Se argumenta la existencia de videos y audios que no han sido presentados.

 

La diputada y periodista Tania Díaz, en una entrevista en el noticiero Venevisión este jueves, fustigó la actitud de periodistas y medios de comunicación difundiendo la noticia sobre los supuestos sobrinos de Cilia Flores basándose principalmente en rumores emitidos por vocerías extraoficiales y anónimas, sin que ninguna fuente oficial venezolana o estadounidense confirme o niegue la información. Para el momento de la entrevista, aún la Fiscalía norteamericana no había emitido los documentos confirmando la detención de los dos venezolanos.

 

Aún en el supuesto de que las dos personas capturadas sean familiares de alguna funcionaria o funcionario gubernamental venezolano y de que sea cierto que hayan estado involucrados en actividades de narcotráfico, hay que recordar que la responsabilidad por estos delitos es personalísima.

 

En contexto

 

Venezuela, país ubicado al norte de Suramérica, es una nación que cuenta con grandísimos recursos económicos: una de las principales reservas de petróleo y gas a nivel mundial, con  grandes yacimientos de hierro, bauxita, coltán, oro y otros metales y minerales; gigantescas cantidades de tierras cultivables, grandes cantidades de agua potable, importantes potenciales turísticos y otros recursos económicos y humanos que la colocan como uno de los objetivos más deseables de la región, tanto para las grandes corporaciones y conglomerados empresariales, como para los gobiernos de países del Primer Mundo que las representan. Venezuela está ubicada a poca distancia de Estados Unidos.

 

La nación ha sido víctima, durante los pasados quince años, de diferentes acciones para acabar con el gobierno del presidente Hugo Chávez y de su sucesor, entre ellos un golpe de Estado, un paro petrolero-empresarial y varias sucesiones de protestas violentas conocidas como “guarimbas”. Diferentes documentos desclasificados han revelado el apoyo del gobierno estadounidense a estas acciones.

 

Desde hace por lo menos dos años, el pueblo de Venezuela es víctima de una guerra económica propiciada por el empresariado local con apoyo internacional, con el fin de minar la popularidad del gobierno de Nicolás Maduro e intentar poner fin a la Revolución Bolivariana, esfuerzos que se redoblaron tras el fallecimiento de Hugo Chávez en 2013, y tras la caída de los precios del petróleo a finales de 2014. El gobierno venezolano ha respondido con importantes planes de ayuda y asistencia a la población más vulnerable, intentos de regular al empresariado y planes para aumentar la producción nacional de alimentos.

 

El caso de los supuestos familiares de Cilia Flores ocurre a sólo tres semanas de una importante y cerrada elección legislativa en Venezuela, en la cual la oposición busca tener la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional para poder iniciar procedimientos contra el gabinete del Presidente Nicolás Maduro, anular la aprobación de presupuestos y créditos adicionales, socavar su margen de actuación ante la guerra económica e intentar un referendo revocatorio en su contra.

 

Otro escenario que se buscaría es el de generar un ambiente de caos e ingobernabilidad que justifique una intervención extranjera. Podría intentarse convencer a la comunidad internacional de que Venezuela es un país gobernado por personas implicadas en el narcotráfico, para justificar una invasión similar a la efectuada contra Panamá en 1989 para derrocar a Manuel Antonio Noriega, gobernante que sí estuvo involucrado en dicho delito.

 

Ruptura con la DEA ha impulsado luchas contra el narcotráfico

 

En agosto de 2005, el presidente Hugo Chávez decidió expulsar a la DEA de territorio venezolano. La acusó de “apoyar al narcotráfico” en su país y de “hacer inteligencia contra el gobierno”. Diez años después, el gobierno venezolano informó que sus fuerzas de seguridad duplicaron la incautación de drogas con 555,74 toneladas de sustancias estupefacientes de distintos tipos. También informaron que se logró capturar, en dicho período, a más de 110 capos ligados al tráfico de droga y legitimación de capitales. Denunciaron que, en las dos décadas en las que la DEA operó en Venezuela “no se registraron capturas de capos ni personas vinculadas en menor o mayor medida a organizaciones internacionales del narcotráfico”.

 

En noviembre de 2008, el presidente de Bolivia, Evo Morales, decidió suspender indefinidamente las operaciones en su país  de la DEA, tras acusarlos de realizar espionaje y conspiración contra su Gobierno.  Morales acusó a la agencia de apoyar económicamente el fallido golpe cívico prefectural realizado ese año contra su Gobierno. El pasado mes de agosto de 2015, Morales señaló que, tras la expulsión de la DEA, se logró una disminución de 30% en el tráfico de cocaína en el país andino.

 

(Alba Ciudad)