Manuel Espinoza Roa, conocido como el “monstruo de Santa Rosa”, atacado por el remordimiento de conciencia y cansado de su vida como prófugo, reveló este miércoles a un diario marabino la dirección de su paradero en Caracas, porque se cansó de huir. “Ya envié la dirección, ahora quedará en sus manos que me agarren”, escribió.
Roa, aunque al principio aseguró ser inocente, es acusado de violar, torturar y asesinar a su pareja, Greily Ortega (25) y a su tres hijastros de 9, 7 y 6 años, el pasado 7 de septiembre, en Santa Rosa de Agua, estado Zulia.
“Ya me cansé de esta vida de fugitivo que tengo, esta será mi entrega, que pase lo que tenga que pasar, para qué fiscales si igual me van a matar”, escribió por un mensaje de texto a un periodista del diario Versión Final.
Aclaró que la casa de una de sus tías y de un tío materno, esta “en La Candelaria, al lado del depósito de Unicasa, en una pensión; y él vive en Las Minas de Baruta, más abajo del Colegio Americano, al final de la calle Victoria, a mano derecha, bajando unas escaleras que dan con la calle Federación”.
Recordemos que el presunto autor del macabro hecho que conmovió al Zulia, dijo a las autoridades durante su interrogación que “cómo va a creer la gente que yo voy a matar a mis hijastros, si yo los atendía, les hacía desayuno, almuerzo, cena, le lavaba hasta la ropa, los bañaba, porque la madre era incapaz de bañarlos, de hacerles comida”.
El presunto múltiple asesino militó en la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), hace tres años.
(LaIguana.TV)
