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Tres sargentos del Ejército, un cabo primero y un distinguido fueron condenados luego de ser encontrados culpables de haber sustraído 67 fusiles automáticos livianos (FAL) y 68 cargadores que tomaron del Agrupamiento de Milicias Cono Sur de Portuguesa, según expediente CJPM-CGM-006-14 del Consejo de Guerra de Maracay.

 

Los sargentos condenados son Gerson Arvey Calambas Valois, Jesús Araque Araque y Erwin Tulio Rivero Loaiza, a quienes les impusieron cinco años de prisión. Igual condena pagarán el cabo 1º Luis Ramón Azuaje Milano y el distinguido Williams Saúl Chirinos Briceño. Dos civiles también fueron condenados: Rubén José Corrales Contreras (cinco años) y Eduardo Francisco Méndez Artigas (tres años y nueve meses). Por ese mismo caso quedaron absueltos el coronel José Humberto Sarmiento Rugeles, el mayor Herschel Humberto Miranda Molina, el sargento 2º Naudy Manuel Gómez Rosendo y el cabo 1º José Javier Villamizar Guanda.

 

Vendidos al pran. Los fusiles fueron sacados entre octubre y noviembre de 2013. De 10 en 10 se los llevaban envueltos en sábanas del Agrupamiento de Milicia Portuguesa, ubicado en Guanare. Luego eran tirados en un montarascal donde los dos civiles pasaban buscándolos para comercializarlos al pran (cabecilla) del Centro Penitenciario de los Llanos (Cepella), según las investigaciones de Fiscalía Militar. Los dos civiles, apodados “Culín” y “Bombillo”, compraban los fusiles entre Bs 45 y Bs 50 mil.

 

“Se evidencia la existencia de una conducta dolosa, deliberada y con pleno conocimiento de sus actos, ejecutados de una manera premeditada, planificada y sigilosa”, concluyó el Consejo de Guerra de Maracay al emitir la sentencia.

 

“Dónde estará toda esa cantidad de fusiles y para qué estarán siendo utilizados”, dijo el fiscal militar capitán José Alexander Sánchez Zambrano al presentar la acusación.

 

Fiscalía Militar rechazó la decisión del Consejo de Guerra de Maracay que favoreció a las máximas autoridades militares del Agrupamiento de Milicia Portuguesa, coronel Sarmiento Rugeles y mayor Miranda Molina. La Corte Marcial admitió el recurso para decidir si confirma las condenas o las modifica, según sentencia CM-002-15.

 

(ÚN)