El fútbol es un deporte de contacto en el que se pueden ver, a menudo, acciones feas y entradas muy duras. Pero lo que sucedió en un partido amateur de Turquía roza el delito.

 

Correspondiente a la liga local de Aydin, se jugaba el partido entre el Sanayispor y el Dalhcaspor. Entrada la segunda mitad, el zaguero Mehmet Degirmenci, del Sanayispor, agredió brutalmente al delantero Kayhan Karakas del Dalhcaspor, propinando una tremenda patada en la cara cuando el jugador ya estaba en el suelo, tendido, mientras se dolía de una falta previa.

 

La patada, a sangre fría, sin balón de por medio y cuando el defensa ya había visto la tarjeta roja, es una acción -llena de rabia y mala sangre- de las más bochornosas que se recuerdan en un partido de fútbol.

 

Tras producirse la bestial patada, los compañeros del agredido corrieron detrás de Degirmenci. Afortunadamente, y a pesar de recibir nueve puntos de sutura en la mandíbula, el agredido pudo salir por su propio pie del terreno de juego.

 

Las reacciones a esta despiadada agresión no se han hecho esperar. El presidente del Sanayispor ha despedido al agresor, Mehmet Degirmenci, del equipo. Por su parte, el abogado del agredido ya ha dicho públicamente que denunciarán a Degimernci y solicitarán una pena entre uno y tres años de cárcel.

 

(Libertad Digital)

patada-cua.jpg