A la búsqueda de un ‘refugio seguro’ en el mercado legal de marihuana, grupos de narcotraficantes están cultivando hierba entre las granjas y almacenes autorizadas a comerciar con esta planta en Colorado, uno de los dos primeros estados de EE.UU. en legalizar el cannabis. Después, los narcos la trasladan en secreto a otras zonas y obtienen beneficios millonarios con su venta, según una investigación de ‘Associated Press’ que cita a funcionarios del Departamento de Justicia y diversos expedientes judiciales.
Uno de los casos hace referencia al dueño de un negocio de deportes extremos que introdujo cientos de kilos de marihuana cultivada en Colorado en sus aviones -con los que impartía clases de paracaidismo- y los trasladó a Minnesota. Las fuentes citadas por AP aseguran que el cargamento fue vendido por millones de dólares en efectivo. En otro caso, un ciudadano de Denver fue acusado de enviar más de 100 paquetes de FedEx repletos de marihuana a Búfalo (Nueva York), donde varios traficantes se repartieron el envío. Otros 20 narcos, muchos de ellos procedentes de Cuba, han sido acusados de reubicarse en Colorado para cultivar marihuana que después mandan a Florida, donde puede duplicar su precio en comparación con las tiendas del Estado de las Rocosas, donde se vende legalmente.
Estos casos confirman el temor esgrimido por los contrarios a la legalización, quienes desde hace tiempo argumentaban que el experimento en Colorado atraería a narcotraficantes de otros estados de EE.UU. en los que la venta y el cultivo de marihuana sigue siendo ilegal. Una de las fuentes del negocio son los propios residentes o turistas que visitan Colorado, que compran la droga y la trasladan a otras zonas de Estados Unidos. Sin embargo, la mayor preocupación de las autoridades son los grandes narcotraficantes que se mudan al Estado con la intención de cultivar y vender en mercados más lucrativos.
El fenómeno traspasa fronteras. Tal y como publicó este diario, en Méxicoganan adeptos los diversos tipos de marihuana importados directamente de California. Quien tiene las conexiones adecuadas saca provecho de esta inversión de flujos comerciales para surtirse con las cepas producidas con la alta tecnología desarrollada en las ‘universidades’ del área de la Bahía de San Francisco, como las Oaksterdam (combinación de Oakland, la ciudad donde tiene su sede, con Ámsterdam) University y la escuela ‘online’ Cannabis University, que de manera legal y publicitada ofrecen diplomados sobre todo lo que involucra la industria de la marihuana: producción, transporte, distribución y comercialización.
¿Qué fue de «la guerra contra las drogas»?
La despenalización del uso de la marihuana en 24 estados de Estados Unidos (principalmente con propósitos medicinales, pero también recreativos enAlaska, Colorado, Oregón y Washington) ha roto en su origen con la declaración de “guerra contra las drogas” que lanzó el presidente Richard Nixon en 1971, en la que arrastró a todo el hemisferio. Uruguay ha legalizado la marihuana y otros países han flexibilizado sus reglas. En Brasil, considerado el mayor consumidor mundial de crack y uno de los mayores de marihuana, el debate sacude a la sociedad desde hace más de un año. Exactamente desde que un hombre de São Paulo presentó un recurso ante el Tribunal Supremo Federal (STF), tras ser condenado en base al artículo 28 de la Ley de Drogas a dos meses de servicio comunitario por la posesión de tres gramos de hierba. La cuestión alcanzó un punto de inflexión el pasado septiembre, tras el voto a favor de dos magistrados del STF sobre la posibilidad de despenalizar la posesión.
Mientras, el crecimiento de la producción doméstica también ha provocado que se reduzca la demanda estadounidense de marihuana importada. La Patrulla Fronteriza de EEUU ha informado de importantes descensos en la incautación de hierba de contrabando, de 2,5 millones de libras en 2011 a 1,9 en 2014.
La tendencia en Estados Unidos apuntala los argumentos de los contrarios a la legalización en Nebraska y Oklahoma, que lanzaron un proceso penal a finales de 2014 con objeto de que se declarase inconstitucional la legalización de la marihuana en Colorado. En aquel momento, aseguraron que la medida enviaría toneladas de hierba a sus estados. La Administración Obama instó al Tribunal Supremo a rechazar la demanda, asegurando que Colorado no es responsable de las ‘fugas’ de hierba.
(El Confidencial)
