La noche de este viernes 5 de febrero Róger Anderson Zabala Marval, albañil de 22 años de edad, se hallaba en su vivienda, ubicada en el barrio El Milagro (estado Zulia), jugando a la ruleta rusa con su revólver. Su cuñada, Olfranlys Karola Paz Barvenis, de 22, se encontraba muy tranquila frente a él, observándolo. «Vamos a ver si tienes suerte», le dijo ella.
La joven nunca se imaginó que estas serían sus últimas palabras. Zabala, accidentalmente, activó el gatillo de la pistola y de un disparo le perforó el ojo derecho a su cuñada. Los familiares, al escuchar la detonación, corrieron pronto hacia la habitación e intentaron auxiliar a la dama. Esta fue trasladada de emergencia al Hospital Pedro García Clara, pero ingresó sin signos vitales.
Zabala, al ver lo que había sucedido, huyó con el arma de fuego. Los familiares de la víctima, minutos después, declararon ante las autoridades policiales que se había tratado solo de un accidente. El joven siempre había sido una buena persona y estimaba mucho a su cuñada.
La hoy fallecida, cabe destacar, era esposa de un Guardia Nacional. Este, para el momento del trágico suceso, se hallaba trabajando en Caracas.
(LaIguana.TV)
