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El diario alemán ‘Bild’ ha publicado la última carta del copiloto Andreas Lubitz, que fue enviada por correo electrónico a uno de sus médicos. El 24 de marzo del año pasado, Andreas Lubitz estrelló el avión Airbus A320 de Germanwings que pilotaba en los Alpes franceses. En la tragedia aérea murieron 150 personas.

 

En la carta enviada a su médico 14 días antes del siniestro, Lubitz se queja de problemas con el sueño y del deterioro de la visión. El copiloto confesó que el período máximo de sueño durante la noche apenas superaba las dos horas, pero había noches en las que Lubitz no podía dormir. Además, el piloto informó que había elevado la dosis de mirtazapina (un antidepresivo, que también se utiliza como somnífero). «Con la dosis más alta estoy más inquieto y a veces tengo pánico con respecto a mi visión. Tengo miedo de quedarme ciego, y la idea sobre mi visión no sale de mi cabeza», señaló Lubitz, subrayando además que le molestaba la tensión permanente se sentía en sus ojos. «Quiero ser muy claro: Si no fuera por los ojos, todo estaría bien», escribe.

 

Unos meses antes de estrellar el avión, el copiloto buscó asistencia médica y visitó a unos 40 médicos. Muchos de ellos se dieron cuenta de que el joven tenía problemas mentales. Anteriormente, salió a la luz información que durante unos años Lubitz había sufrido una depresión severa que casi lo lleva al suicidio.

 

Otra nota de Lubitz

Este febrero, la investigación reveló el contenido de una nota que escribió antes del hecho. Lubitz, que había recibido tratamiento psiquiátrico por depresión y presuntamente ocultó la gravedad de su enfermedad a su empleador, había escrito una nota encabezada «Decidiré el domingo», con el código de un vuelo que salió de Barcelona dos días antes de tomar su drástica decisión.

 

La nota, recuperada por los investigadores de un bote de basura en el apartamento que Lubitz alquilaba en Dusseldorf, se enumeran tres opciones: «[encontrar] voluntad interna para trabajar y seguir viviendo», «luchar contra el estrés y el insomnio» y «dejarme ir».

 

(RT)