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El sexo es una de las necesidades básicas del ser humano y debemos satisfacerla. Ya sea por amor o mero placer, el sexo es algo que está presente en nuestras vidas y hay que disfrutarlo; sin embargo, esto se vuelve difícil ante la posibilidad de un embarazo.

 

Durante años la sociedad decidió que la mujer sería la principal responsable de la creación de vida. A pesar de que es tarea de dos, las mujeres cargaban con la responsabilidad de escoger un método anticonceptivo que impidiera un embarazo. Para los hombres, aparte del condón, la única opción era una vasectomía. Al ser un método quirúrgico, radical y en la mayoría de los casos es definitivo no era una decisión fácil de tomar.

 

Desde condones hasta pastillas del día siguiente, es el cuerpo de la mujer el que por décadas ha cargado con desajustes hormonales y objetos exóticos dentro del cuerpo, parcialmente privadas de la libertad de tener relaciones sexuales por miedo a un embarazo no deseado y atadas a los distintos métodos para contrarrestar a la naturaleza.

 

Clemens Bimek decidió hacer algo para atacar esta desigualdad y creó un switch que permite a los hombres prender y apagar su fertilidad. El Bimek SLV es un switch de esperma; un botón que prende y apaga la circulación de espermatozoides impidiendo que alcancen el conducto eyaculador y regresándolos a los testículos.

 

Se inserta en el escroto en una posición ‘abierta’ que no impide el flujo libre en una cirugía ambulatoria de aproximadamente 30 minutos y garantiza que el esperma, una vez apagado el switch, fluirá dentro del cuerpo durante más o menos 3 meses o lo equivalente a 30 eyaculaciones. La empresa creadora recomienda de cualquier forma realizar análisis de espera después de un mes de uso para asegurarse que los espermatozoides hayan abandonado su sistema y determinar los efectos individuales.

 

Ahora los hombres han liberado a la mujer del cuidado casi absoluto de un embarazo, desde la vasectomía hasta el condón, este es el método que controla la fertilidad sin afectarla en lo absoluto. Cada hombre puede decidir ahora cuándo el esperma puede llegar al pene durante el coito, cuándo esta listo para crear vida y responsabilizarse de ella o cuándo simplemente quiere disfrutar del sexo.

 

No es necesario retirar el dispositivo si se desea otra vez la circulación normal de esperma, simplemente hay que apagar el switch. Bimek SLV es un paso adelante en el control sobre el cuerpo humano.

 

Ahora que podemos apagar y encender la luz de lo que antes era imposible, hagámoslo con responsabilidad y por las razones correctas.

 

(culturacolectiva.com)