El rey Felipe VI evaluará con los líderes políticos españoles la última semana de abril si tiene margen para proponer un candidato a jefe del Gobierno o disuelve el Parlamento para que haya nuevas elecciones el 26 de junio.

 

La Casa del Rey anunció hoy que el monarca se reunirá con los dirigentes de los partidos con representación parlamentaria los días 25 y 26 de abril en una ronda destinada a saber si puede plantear un aspirante al Ejecutivo que cuente con suficientes apoyos, o por el contrario procede a la disolución de las Cortes.

 

La reacción de los partidos fue la de asegurar que hay posibilidad todavía de que haya un Gobierno, pero el pesimismo se extiende al respecto.

 

Según los plazos marcados por la Constitución si España no tiene un nuevo Gobierno antes del 2 de mayo, al día siguiente se publicará el decreto de convocatoria de nuevas elecciones legislativas para el 26 de junio, firmado por el rey.

 

PARLAMENTO FRAGMENTADO

Las elecciones legislativas del 20 de diciembre depararon un Parlamento fragmentado como nunca en la historia de la actual etapa democrática española, con el PP (centroderecha) con 123 escaños; PSOE (socialistas) con noventa; Podemos (izquierda) con 69 y Ciudadanos (liberales) con cuarenta, mientras que completan el Congreso pequeños partidos nacionalistas y de izquierda.

 

Felipe VI ya tuvo dos rondas de contactos con líderes parlamentarios y en la primera el actual jefe del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy (PP), declinó el ofrecimiento de someterse a la investidura parlamentaria.

 

De la segunda ronda salió como candidato propuesto por el monarca el socialista Pedro Sánchez, que fue rechazado por el Congreso en dos votaciones en los primeros días de marzo.

 

Las posteriores negociaciones entre partidos han tenido como protagonistas a los socialistas, a Ciudadanos (liberales) y a Podemos (izquierda).

 

La semana pasada, tras una reunión a tres partes, se constató la dificultad de llegar a un acuerdo, lo que abre la puerta a que se convoquen nuevos comicios.

 

PREDRO SÁNCHEZ INSISTE

El socialista Pedro Sánchez dijo hoy que “no se rinde” y pidió a Podemos que, en “la hora límite” antes de que se convoquen nuevas elecciones, haga posible un pacto para “poner fin al gobierno de la vergüenza” de Mariano Rajoy.

 

Sánchez también solicitó a Ciudadanos que “abandone las líneas rojas” y favorezca una negociación con Podemos para negociar un acuerdo tripartito antes de la ronda de consultas del rey.

 

La respuesta de Ciudadanos fue considerar “casi imposible” llegar a un acuerdo en dos semanas al asegurar que los partidos “de la pinza”, PP y Podemos, se han puesto ya en marcha para unas nuevas elecciones, en palabras del portavoz en el Congreso, Juan Carlos Girauta.

 

Por su parte, el portavoz parlamentario de Podemos, Íñigo Errejón, mantuvo su rechazo a los liberales y subrayó que hay una “mayoría progresista” capaz de sacar iniciativas adelante, en alusión a la unión de partidos de izquierda y nacionalistas.

 

PSOE Y CIUDADANOS MANTIENEN EL ACUERDO

Mientras tanto, el PP también repartió culpas por el bloque a otros partidos, en especial a los socialistas y a los liberales, a los que acusó de “jugar” con los españoles al dar la impresión de que ambos podrían gobernar.

 

PSOE y Ciudadanos han mantenido en estas semanas el acuerdo firmado con cerca de doscientas medidas que aplicar por un nuevo gobierno, pero la suma de ambos (130 escaños) queda lejos de la mayoría absoluta de la Cámara (176).

 

Los contactos con Podemos (69 escaños) no han tenido resultado y, de no mediar nuevas negociaciones, el plazo del 2 de mayo se agotará sin que haya nuevo Ejecutivo, lo que llevará a nuevos comicios.

 

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(EFE)