La pequeña Nailibeth o “Pepa” como le dicen por cariño sus familiares, se encuentra en casa sana y salva, luego de que el pasado viernes a las 4.00 de la tarde su progenitora Arbelis Carolina Labarca Carmona, de 20 años la dejó abandonada, en una cola bachaquera al norte de Maracaibo para entrar al supermercado a comprar pañales.
Fueron más de 63 horas, sin que pepa pudiera sentir el calor familiar en el hogar que la vio nacer hace cuatro meses, todo gracias a una terrible decisión que tomó su mamá de dejarla al cuido de una completa desconocida mientras hacía la cola para comprar pañales en el supermercado Latino de Delicias Norte. Este lunes a las 9.00 de la mañana, la bebé fue entregada por orden de las autoridades a su progenitora en la sede de la casa hogar Nuestra Señora de La Paz, parroquia Cecilio Acosta de Maracaibo, cerca del estadio Niños Cantores, lugar donde la inocente, pasó tres noches y dos días enteros recluida y bajo custodia de las cuidadoras. Al momento de la decisión las autoridades dictaminaron un error de la madre y no un abandono absoluto de su hija, delito que sí es penado por la ley.
Con buen semblante y acurrucada en la cama de sus padres la pequeña ya se encuentra en su casa número 60-67 ubicada en un callejón sin salida del sector Pueblo Nuevo, parroquia Olegario Villalobos de Maracaibo.
“Pepa llegó esta mañana, jugó un buen rato, sus ojos brillaron de alegría al entrar a su cuarto y, nosotros los mayores, por fin volvimos a respirar tranquilidad luego de este hecho lamentable que sacudió a la familia”, cuenta Pedro Labarca abuelo de la bebé.
Fue a las 4.00 de la tarde del pasado viernes 22 de abril, cuando a Arbelis le tocó entrar al supermercado referido para comprar productos regulados, entre ellos los pañales de su hija, pero su afán por realizar la compra, hizo que tomara en poco el cuidado de su propia hija a quien entregó a una desconocida que también hacia la cola.
Y así, de manos en manos pasó Pepa, por toda la cola bachaquera, hasta llegar a las brazos de una mujer que sin saber de quién era la niña, se la llevó y, afortunadamente la entregó a las autoridades de Protección del Niño, Niña y Adolescente (LOPNA), en Maracaibo.
“Es un favor de Dios que esta mujer decidiera llevar a Pepa a con la policía, cualquier otra persona habría visto la posibilidad de tener a nueva hija bien linda en casa, sin que nadie pudiera encontrarla… peor aún, cualquier otro bachaquero la habría llevado a la frontera y vendido en pesos a una familia apurada por una criatura en Colombia”, comentaron vecinos de la familia.
En horas de la madrugada del sábado, Pepa fue trasladada a la casa hogar donde según parientes, sus cuidadoras intentaron darle comida, como sopa y puré alimentos que la pequeña rechazó por ser aún lactante.
“Esa una noche fue muy difícil para todos en casa, llorábamos y llegamos a pensar que no la volveríamos a ver, pero en la mañana cuando fuimos al CICPC, nos dijeron que hacía un par de horas la habían recluido en una casa hogar”, expresó el abuelo.
Con la dirección en mano, la arrepentida madre, se trasladó al refugio y fue hasta entonces cuando su hija pudo ser amamantada por primera vez en más de 12 horas que pasó sin poder comer algo.
Durante el fin de semana, entre tres y cuatro veces al día Arbelis, quien no dio declaraciones a la prensa, fue llevada por la familia, para que pudiera alimentar a la hija. La familia asegura que la joven madre está arrepentida de la decisión que tomó ese día y señalaron que fue ella quien por sus propios medios se movilizó para que le fuera devuelta la menor.
(Noticia al Día)
