Este jueves fueron sepultados y homenajeados en el Estadio Miguel Angel Muñoz del estado Guárico, el entrenador de un equipo de béisbol de “Los Criollitos”, Rafael Fernández y un familiar, Stalin Fernández.
Las víctimas vivían en la casa cercana al lugar donde abatieron al buscado delincuente «El Picure». Un miembro de la familia Fernández relató: “A ellos los sacaron de la casa, los golpearon y después los metieron allí con el Picure para matarlos”. “Ellos no eran ningunos secuaces como escribieron”.
Rafael Fernández entrenó durante 30 años a generaciones de niños del equipo preinfantil llamado Los Turpiales, ganadores en el año 2014. Marcial Rodríguez, presidente de la liga de béisbol menor, dijo en el sepelio: “Queremos que se investigue este crimen”.
(LaIguana.TV)