La ironía de que Thierry Henry, uno de los mejores futbolistas franceses de todos los tiempos, sea parte de la selección que buscará derrotar a “Les Bleus” en las semifinales del Mundial Rusia 2018 no pasa desapercibido para su excompañero de equipo Didier Deschamps, que calificó a la situación de “bizarra”.

 

Cuando Francia enfrente a Bélgica en la semifinal del Mundial el martes en San Petersburgo, Henry estará en el banquillo rival y tratará de ayudar a impedir que su propio país se meta en la final del evento.

 

Del otro lado estará Deschamps, su capitán en la selección francesa que ganó el Mundial como local en 1998 y que ha sido el entrenador de Les Bleus en los últimos seis años.

 

“Es extraño, bizarro, porque él es francés y estará en el banco rival”, dijo Deschamps en el programa deportivo francés Telefoot. “Pero es alguien a quien realmente aprecio, estoy feliz por él”.

 

Henry, que marcó 51 goles en 123 partidos internacionales, jugó cuatro Mundiales para Francia. Además del título alcanzado en 1998, integró el plantel que llegó a la final en 2006 y también estuvo en los torneos de 2002 y 2010.

 

Pero desde hace dos años es asistente técnico de Roberto Martínez, en su primera incursión en el mundo de los entrenadores, y se ha convertido en una pieza clave del andamiaje de los “Diablos Rojos”.

 

(Agencias)