Así como lo lee: menos de lo que cuesta un Iphone es lo que cuesta en Estados Unidos el arma con la que Omar Mateen, disparó para causar la masacre en el club gay Pulse de Orlando, Florida.
El arma, que causó la muerte de unas 50 personas es un AR 15, un fusil de asalto, conocida como la versión civil del fusil militar y es una de las favoritas de los estadounidenses. Se puede comprar en cualquier armería física o por internet a partir de 500 dólares en su calibre más simple.
Según explicó el Departamento de Justicia la utilizada en la masacre es de calibre 223 y se puede comprar a partir de 700 dólares.
Esta arma está prohibida en otros países del mundo, e incluso solo pueden portarla funcionarios de seguridad, pero resulta que en la tierra del Tío Sam, desde donde tanto se critica “la inseguridad” de otros países del mundo, se permite la venta libre de este tipo de armas y que cualquiera pueda ir un día a una tienda a comprarla.
Esta vez, esa “venta libre” generó la muerte de más de 50 personas que no solo eran gays, sino además en su mayoría eran latinos. Es decir, un acto de odio, de homofobia y xenofobia a la vez.
Pero hay que recordar que no es la primera vez que una tragedia como esta ocurre por la venta libre de armas: recordemos la que ocurrió hace apenas unos años en un cine, con el estreno de la tercera parte de Batman y tantas otras.
¿Será que están esperando otra tragedia para darse cuenta del peligro que reviste la facilidad de comprar un arma en Estados Unidos?
(LaIguana.TV)
