El arzobispado de Ecuador descubrió a un venezolano, identificado como Fabrizio Pineda, quien se hacía pasar por sacerdote y ejercía sus simuladas funciones en una iglesia de Quito.

 

La mentira de Pineda quedó en evidencia tras las investigaciones que llevó la Arquidiócesis de Quito contra contra él y otros dos curas de la misma nacionalidad, identificados como Carlos Cabezas y Rafael Bitter.

 

En este sentido, el arzobispado ecuatoriano emitió un comunicado en el que aclaró que el falso padre “no tiene ningún registro de ordenación”.

 

El obispo del estado Trujillo -de donde es oriundo el venezolano-, monseñor Oswaldo Azuaje, fijó posición al respecto e indicó: “Nos encontramos ante una persona que sabe profesionalmente mentir, su nombre y las fotografías que nos han llegado revestido de sacerdote corresponden al Fabrizio Pineda que algunos hemos conocido”.

 

Agregó que el acusado se acercó al obispo de Punto Fijo para que concediera una carta de buena conducta, «pero nada más. Monseñor Carlos Cabezas solo usó tres palabras en donde dice que es buena gente, pero en ningún momento lo recomendó ni para el seminario ni mucho menos como sacerdote, porque no lo era. Simplemente una persona conocida, buena gente”, expresó.

 

Según reseñaron medios de comunicación, después de conocerse la trama del ciudadano los representantes de la Iglesia católica trujillana informaron que Pineda recibirá la excomunión.

(LaIguana.TV)