El pasado domingo 22 de julio fue hallado en Colombia el cadáver de Luis Antonio Marcelos Carbonell, de 26 años de edad y de nacionalidad venezolana, quien se encontraba residenciado en el vecino país desde hacía un par de meses.

 

Los restos del joven fueron localizados en el sector Mata de Mango, ubicado a pocos metros de la entrada del corregimiento de La Gabarra, municipio Tibú, en el departamento del Norte de Santander.

 

A pesar de que se desconocen las causas exactas por las que Marcelos Carbonell fue asesinado, la Policía colombiana sospecha que lo ultimaron a pedradas debido al estado en el que se encontraba el cadáver, especialmente el área de la boca y la nariz.

 

La madre de la víctima manifestó a la prensa colombiana que en horas de la mañana del día sábado, el joven salió a depositar un dinero para sus familiares en Venezuela y que poco después de haber efectuado la diligencia se encontró con un grupo de amigos.

 

“Mi hijo iba a cumplir dos meses de haber llegado. Él tenía una niña que apenas cumple nueve meses y quería trabajar para sacarla adelante. Se la pasaba todo el día en una mula en la finca donde trabajaba y le pagaban 35 mil pesos al día”, indicó.

 

Precisó el familiar que el hoy occiso efectuó la transacción bancaria en compañía de un primo, quien fue la persona que alertó a los deudos de lo sucedido.

 

“Mi hijo estaba con mi sobrino y él nos dijo que Luis Antonio terminó de hacer la transacción  y se encontró con unos amigos. Entonces, mi sobrino no lo esperó y se fue a dormir, y mi hijo nunca llegó. Desde allí, no sabemos qué pasó”, añadió.

 

(LaIguana.TV)