El Primer Ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, afirmó que su Gobierno no está dispuesto a aceptar la entrada de venezolanos a su territorio, aunque la Organización de las Naciones Unidas (ONU) les obligue a otorgar asilos políticos.

 

«Somos un pueblo generoso y permitimos que los venezolanos vengan a Trinidad y Tobago a comprar suministros y permanezcan un corto tiempo (…) Tengan en mente que no somos China, no somos Rusia, no somos Estados Unidos, somos una isla pequeña, con espacio limitado (…) y no podemos permitir que las Naciones Unidas nos obligue a ser un campo de refugiados», manifestó el mandatario durante una rueda de prensa.

 

Recordemos que el pasado mes de abril, un total de 82 venezolanos fueron detenidos y posteriormente deportados de Trinidad y Tobago. En dicha oportunidad, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) rechazó la medida, al tiempo que acusó al Gobierno de la nación caribeña de violar el Derecho Internacional de Refugiados.

 

(LaIguana.TV)