Una de las grandes contradicciones que se ha dado durante este proceso, ha sido la emisión del Decreto 2.248, que consiste en la creación de la Zona de Desarrollo Estratégico Nacional Arco Minero del Orinoco, firmado por el presidente de la República, Nicolás Maduro, el pasado 24 de febrero, efectuado en la sede del Banco Central de Venezuela (BCV) , en Caracas, y que constituyó el arranque del Motor Minería de la Agenda Económica Bolivariana que convoca a la explotación del 12 por ciento del territorio nacional a unas 150 empresas transnacionales, en una de las áreas más importantes del país y para muchos analistas, no solo para Venezuela, sino para la humanidad, por considerarse esta zona geográfica, parte del pulmón vegetal con que respira el planeta que nos sostiene. Esto significa una gran contradicción porque una de las banderas que defiende este proceso está enmarcada dentro de la propuesta ecosocialista, lo cual es considerado un dislate, pues no se puede armonizar el modelo depredador capitalista con el modelo ecosocialista.

 

Como respuesta a este posible ecocidio, varios movimientos y ciudadanos decidieron organizarse para evitar el desarrollo de este proyecto destructor y dentro de las acciones concertadas, introdujeron el pasado 31 de mayo a través de la Sala Político Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia una Demanda de Nulidad contra el Arco Minero del Orinoco, la cual fue admitida el 21 de junio.

 

Una de estas voces, muy preocupado por los alcances de este Decreto, ha sido el profesor Héctor Navarro, quien en esta entrevista, advierte al pueblo venezolano, sobre la importancia de conocer y concienciar acerca de los peligros de este megaproyecto.

 

(Aporrea)

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