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Luego de entregarnos a las delicias gastronómicas que la festividad decembrina pone en nuestra mesa: las tradicionales hallacas, ensalada de gallina, pan de jamón, pernil y la gran variedad de dulcería criolla, es aconsejable comenzar el año nuevo tomando algunas medidas que nos permitirán recuperar nuestro peso habitual y con ello evitar alteraciones en el organismo.

 

¡Agarra dato, come sano!

 

Lo primero que se debe considerar es que toma tiempo perder los kilos ganados en todo un mes, por lo cual hay que evitar las dietas muy rigurosas que producen daños al organismo y que nos hacen recuperar todavía más peso cuando las detenemos; por ello, es fundamental mejorar o transformar nuestros hábitos alimentarios para que el resultado sea sostenible en el tiempo y, un buen momento para hacerlo, es comenzando un nuevo año.

 

Lo recomendable es empezar con una alimentación balanceada, tomando como guía el Trompo de los Alimentos, cuidando mucho comer las proporciones recomendadas según la franja, así como la práctica de actividad física y la ingestión de agua suficiente complementan las tres claves para mantenernos saludables.

 

Debemos garantizar el consumo de la franja verde (frutas y hortalizas) la segunda más ancha del trompo: no olvide las ensaladas verdes en cada comida y coma frutas a la hora de merendar, pues tanto unas como las otras nos ofrecen vitaminas y minerales, así como fibra para mantener nuestra salud gastrointestinal y valores de colesterol normales.

 

Quizás lo más importante para bajar de peso es comenzar el año con una energía diferente. Ejercítese 30 minutos al día, caminando, bailando, andando en bicicleta y/o jugando con las niñas y los niños en espacios abiertos.

 

Está comprobado que el ejercicio acelera la pérdida de peso, también fortalece nuestro sistema respiratorio y cardiovascular, protegiéndonos así contra enfermedades crónicas no transmisibles y mejorando nuestra calidad de vida.

 

Disminuya el excesivo consumo de refrescos, sustitúyalos por jugos de frutas naturales, con poca azúcar, así estaremos comenzando una nueva etapa de vida en este 2015. Evite igualmente comer en la calle, planifique sus comidas y elabórelas en casa prefiriendo las preparaciones asadas, al horno, guisados en salsa natural o a la plancha, para evitar así el consumo de grasa en grandes cantidades.

 

Para reducir la ansiedad y aplacar el apetito entre comidas, lo recomendable es hacer dos meriendas al día, una en la mañana y otra en la tarde. Muchas personas suelen recurrir a dulces o alimentos procesados, altos en calorías y sin ningún aporte nutricional.

 

Por último, sustituya los postres muy elaborados y prefiera para comenzar este año la gran variedad de frutas criollas al natural, con esto se previenen padecimientos de enfermedades como el sobrepeso, la obesidad y la diabetes.

 

Planifique sus comidas con el trompo de los alimentos

 

Desayuno:

Arepa pequeña (franja amarilla), queso (franja azul), 1 cucharadita de mantequilla (franja naranja) y una fruta entera (franja verde).

 

Almuerzo:

Elija un alimento de la franja amarilla (granos, cereales, tubérculos o plátanos), uno de la franja azul (carnes, leche y huevos), incluya una ensalada verde y un jugo de frutas natural (franja verde).

 

Cena: 

Coma algo liviano y saludable como una ensalada (franja verde) acompañada de un alimento de la franja azul. Si escoge un alimento de la franja amarilla, procure que la porción sea pequeña.

 

Coma con conciencia

 

El cuerpo humano se mantiene saludable gracias al consumo equilibrado de nutrientes. Por ello, cuando se nos plantean dietas que excluyen algunos rubros y privilegian otros, se producen trastornos en el organismo. Todos los alimentos son necesarios, hasta los difamados carbohidratos.

 

La clave está en la diversidad, en la proporcionalidad y en el consumo de raciones adecuadas. Debemos tener presente que las dietas “mágicas” o de moda pueden ser tan dañinas que son capaces de alterar el equilibrio metabólico del cuerpo, producir trastornos de conducta como la depresión y empujarnos a padecer de enfermedades crónicas no transmisibles.

 

(Nota de Prensa)

 

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