“Podríamos estar a las puertas de una explosión social”, así describió el panorama actual la socióloga e investigadora de la comunicación, Maryclen Stelling, durante la última emisión del programa Análisis Situacional.

 

Indicó que se vive una situación “límite y extrema”, caracterizada por la crispación social. Enfatizó que aunque los venezolanos son una sociedad alegre, con gran sentido del humor, que ha logrado sortear múltiples problemas y  sobreponerse a la adversidad, esas “reservas” se agotaron, lo que significa que “podríamos ir a una suerte de caotización y estar a las puertas de situaciones de violencia”.

 

Stelling aseguró que el hecho de ser una sociedad acostumbrada a “esperar respuestas”, arraigada en una cultura petrolera que aguarda por “soluciones mágicas” emanadas de un Estado proveedor y protector, ha retrasado un posible estallido ante la crisis política y económica que atraviesa el país:

 

“Estas características ha demorado una posible explosión social, porque estamos esperando una magia, un Estado mágico que resuelva o un actor que aparezca y resuelva por mí y para mí los problemas que estoy confrontando”

 

Crisis de liderazgo

 

La investigadora señaló que uno de los rasgos más importantes de la coyuntura actual es la desconexión entre las cúpulas políticas del país y los problemas reales, que está ocasionando lo que califica como una “despolitización de las bases sociales”. Sostuvo que en este momento los actores políticos emplean un discurso descalificador que está ocasionando que se excluyan sectores de la sociedad que están desesperanzados y con temor al futuro:

 

“Hay una suerte de divorcio entre las cúpulas, sus discursos de confrontación y lo que está sucediendo en las bases sociales que están sobreviviendo y haciendo colas. Son dos países completamente diferentes“

 

Alertó sobre una “hiperanomia” dentro de la sociedad, caracterizada por llevarnos a un devenir sin rumbo, donde se articulan la pérdida de valores y el descontrol:

 

“Es una sociedad que ha perdido todo control social y toda normatividad. En este momento aquí todo es posible, por ejemplo el bachaqueo, tiene su origen allí”

 

Stelling indicó que para hacer frente a lo que califica como una “campaña de caotización” debe articularse un discurso político que le haga frente a las campañas internacionales,  de la mano con un discurso mediático. Destacó que los medios de comunicación juegan un papel clave dentro de la construcción de salidas y acuerdos en el conflicto nacional.

 

Insistió en que los puntos de encuentro para el diálogo se están gestando desde la sociedad civil. “Las mismas circunstancias nos están uniendo para buscar soluciones, y en los microcosmos de las comunidades están surgiendo y dando un ejemplo a las cúpulas políticas y económicas”, señaló.

 

Diálogo

 

Ante la interrogante sobre las posibilidades de un dialogo efectivo, Stelling fue enfática en que la solución pasa por “apartar las discusiones” y promover la conversación entre los sectores antagónicos:

 

“Sí es posible el diálogo, pero entendiendo lo que está pasando en las bases y que la solución en el problema de Venezuela no está en las cúpulas”.

 

Opinó que resultaba difícil que el liderazgo se aproximara a las bases, por lo que se mostró favorable a gestar las soluciones y acuerdos desde la sociedad para dar ejemplo a las autoridades.  Hizo un llamado a los comunicadores sociales a “bajar su discurso” frente a lo que está sucediendo realmente, pidió que dejen de polarizar y reseñar una sociedad “fracturada, dividida y sin remedio”, para abrir paso a discursos conciliadores y constructores.

 

Finalmente, instó al Gobierno Nacional a restablecer una conexión con los problemas que abruman a los venezolanos, y promover un discurso esperanzador que ofrezca soluciones y abra puertas a una participación efectiva en la reconstrucción económica del país.

 

(hinterlaces.com)

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