Un muro de tres metros de altura, casi diez kilómetros de largo, y con alambres de púa, divide dos áreas de la ciudad de Lima, una rica y otra extremadamente pobre. Este panorama, sin duda alguna, contrasta las diferencias socioeconómicas de la capital peruana.

 

En este material audiovisual del equipo ATV, se puede corroborar las dos situaciones que se reflejan desde ambos lados del muro, las desigualdades que existen, así como la opinión de sus habitantes.

 

“En realidad quiero que tengamos luz, agua, y que vengan a apoyarnos para que no vivamos así”, manifestó una pequeña que habita en la barriada que divide a la zona alta de San Juan de Miraflores.

 

En esta zona, vales destacar, residen más de 200 familias a pesar de que allí carecen de los servicios públicos más elementales. “Quisiera que el gobierno venga para nos apoyen. Todos sufrimos acá”, expresó una de las pobladoras.

 

(LaIguana.TV)