El nuevo esquema cambiario no es una total liberación, sino una nueva modalidad del control que permite la compra-venta de divisas del sector privado, a la vez que mantiene a salvo las que genera el Estado venezolano.

 

Tal es la explicación que ofrecieron a LaIguana.TV el abogado especializado en temas económicos Juan Carlos Valdez, moderador del programa Boza con Valdez, y el periodista Werther Sandoval, experto en las fuentes económicas y profesor de la Universidad Central de Venezuela.

 

Valdez: sigue habiendo control

 

Valdez señaló que no es correcto hablar de una liberación del tipo de cambio o de una situación de libre convertibilidad de las divisas. “Estamos en presencia de un control de cambios pues el gobierno no incorpora a las subastas del Dicom (Sistema de Mercado Cambiario) las divisas que se generan de la actividad productiva del Estado”.

 

A su juicio, cuando se derogó la Ley del Régimen Cambiario, el gobierno había quedado en la obligación de colocar en el mercado las divisas generadas por el Estado, atendiendo a lo establecido en la Constitución y la Ley del Banco Central de Venezuela. “La regla es el libre cambio y la libre convertibilidad, y el control de cambio es una excepción a esa regla. Cuando derogaron la Ley de Régimen Cambiario, que contemplaba las sanciones para sus ilícitos, el cambio quedó totalmente libre, pero con el acuerdo anunciado por el ministro de Finanzas, Simón Zerpa, según el cual las divisas generadas por el Estado no entran a las subastas, se creó de nuevo un control de cambio”, dijo Valdez, quien afirma estar absolutamente de acuerdo con esa medida.

 

Sandoval: intervención selectiva

 

El periodista especializado y docente Werther Sandoval dice que la liberación solo puede funcionar si es parcial, especialmente en las actuales circunstancias nacionales.

 

“Aquí en Venezuela, el oferente dominante, por manejar el mayor volumen de divisas, es el Banco Central. Es imposible que deje actuar solo al mercado, pues la fijación del tipo de cambio podría quedar en manos de los especuladores y sujeto a los vaivenes de las exportaciones e importaciones, más aun cuando la economía y el país están enfrentando sanciones que afectan sus relaciones económicas con el resto del mundo”, indicó Sandoval.

 

El periodista considera que el BCV adoptará la estrategia de intervenir selectivamente en el mercado de divisas privado, una modalidad a la que en la jerga económica llaman “flotación sucia” del tipo de cambio. La idea es que esa intervención no permanente del instituto emisor mantenga el tipo de cambio dentro de parámetros previstos.

 

“Al parecer y por lo dicho, no habrá intervención directa del BCV en el mercado de particulares, pero sí influirá con juegos de tipo de cambios fijados en Dicom”, señaló.

 

(LaIguana.TV)