Movimientos feministas, compañeros de estudio, familiares y ciudadanos en general se han congregado a las afueras de la Universidad Nacional de las Artes (Unearte) para exigir justicia por el feminicidio de Mayell Hernández Naranjo, joven bailarina de 29 años, integrante del Campamento de Pioneros Madre Hipólita, estudiante de Unearte y madre de una pequeña de dos años, que fue asesinada el 3 de septiembre presuntamente por su expareja.

 

La hermana de Mayell, Mayela Hernández, denunció que la joven había acudido varias veces a la Fiscalía en busca de ayuda ante la violencia que vivía cotidianamente: “Tenemos mucho que hacer, muchísimo, y las instituciones son responsables también de esto. Porque mi hermana fue a pedir ayuda más de una vez y no se la dieron”.

 

“Esa persona -que nosotros estamos seguros que le quitó la vida a mi hermana- no la mató el 3 de septiembre, la mató hace tiempo con su machismo, con su egoísmo, con su imprudencia. Con su maltrato físico y verbal fue poco a poco quitándole los espacios de alegría y felicidad a mi hermana. Esto tiene que servir de reflexión: una Revolución no es completa sino tenemos protegidos a nuestras mujeres, a nuestros niños, a nuestros ancianos”, aseguró Hernández.

 

Por su parte, la bailarina y compañera de estudio de Mayell, Marcela Lunar, exigió justicia ante el caso: “Nos convoca la indignación de que nos quitaron a una amiga: no se murió, la mataron vilmente, la mató el patriarcado. (Exigimos) que se encuentre al culpable, que se tomen las medidas para que se cumpla la ley, no podemos seguir bajo la impunidad, con leyes hipócritas, no podemos decir que tenemos un Estado feminista cuando no nos empoderamos, cuando realmente no liberamos a las mujeres”.

 

“Vamos con mucha fuerza porque el homicidio de Mayell fue invisibilizado en los medios de comunicación, fue invisibilizado también por la Fiscalía. Esta es una compañera que nos duele, nos duele desde adentro”, afirmó Daniela Inojosa, perteneciente a la “La araña feminista”.

 

De acuerdo con la investigación, el presunto responsable, William Enrique Infante Borges, habría ingresado a la residencia de la mujer -ubicada en la urbanización Colinas de Betania de Charallave- donde la apuñaló con un arma blanca varias veces y la asfixió, causándole la muerte.

 

(LaIguana.TV)