La Corte Suprema del estado de Washington (noroeste de EEUU) anuló este jueves la pena de muerte de forma unánime, al considerarla como una violación a su constitución y por ser “racialmente sesgada”.

 

“Dada la forma en que se impone, la pena de muerte tampoco cumple ningún objetivo penológico legítimo”, ratificaron los jueces.

 

De esta manera, el tribunal transformó a cadena perpetua las sentencias de las ocho personas condenadas a muerte.

 

“La Corte deja perfectamente claro que la pena de muerte en nuestro estado se ha impuesto de una manera arbitraria y racialmente sesgada, y se ha aplicado de manera desigual sin servir como justicia criminal”, sostuvo el gobernador del estado, Jay Inslee.

 

La decisión convierte a Washington en el vigésimo estado en abolir la pena capital en la nación norteamericana.

 

(teleSUR)