Una pequeña de dos años, que se encontraba desde hacía unas horas desaparecida, fue encontrada muerta en la fosa del ascensor de la torre D en la Opppe 27, ubicado en Tanaguarena, Caraballeda, estado Vargas. 

 

“Eso pasó porque no funcionan los sistemas de seguridad. Fue el otro niño quien dijo: ‘la niña bajó en el ascensor pero no ha subido”, contó uno de los testigos al diario La Verdad de Vargas. Al parecer, la pequeña se encontraba en el pasillo del piso 3, junto a otro niño de unos cuatro años, cuando se acercó a las puertas del elevador, las cuales se abrieron con facilidad. 

 

“Era un accidente que se pudo evitar. Con tantos niños aquí, ¿cómo es que las puertas de un ascensor se pueden abrir así no más? porque los patines de apertura no estaban funcionando y eso nadie lo sabía”, dijo una residente del edificio, quien informó que el aparato no está operativo desde hace algún tiempo. 

 

La pequeña, de nombre Ariana Calderón, sufrió fractura de cráneo y de clavícula, así como politraumatismo generalizado. Sus familiares transitaron por varios centros asistenciales hasta lograr ser atendida. El medio digital informó que primero fue llevada al Materno de Macuto, luego remitida al hospital del Seguro Social, y de allí al Pérez Carreño.

 

En el año 2017, otra tragedia enlutó a ese urbanismo. Ya que un pequeño de un año de edad murió al caer por la ventada de un apartamento ubicado en el piso 9 cuando estaba al cuidado de su tía de 16 años. 

 

Además, en mayo de este año un bebé de dos meses cayó del piso 4 cuando su hermanita de 6 años, quien lo tenía cargado, se asomó por la ventana. 

 

(LaIguana.TV)